El alcalde de Puebla de Guzmán, Antonio Beltrán (PSOE), ha asegurado este viernes que el proyecto previsto para el llamado ‘lago asesino’ eliminará los 80.000 metros cúbicos de CO2 en tan solo cuatro meses una vez se coloque el colector por parte del Instituto Geológico Minero. En cualquier caso, Beltrán ha asegurado que «no es una obra urgente» puesto que ya hay dos pequeños colectores que están «aliviando la presión».
En rueda de prensa, Beltrán ha asegurado que el proyecto está programado entre el Instituto Geológico Minero y la Consejería de Innovación, Ciencia y Empleo, y el presupuesto ya está acordado por lo que ahora depende del Instituto Geológico Minero cuando se acometan los trabajos para colocar el nuevo colector que saque el gas hacia la superficie.
Según ha explicado el alcalde de Puebla de Guzmán, ahora mismo «ya hay dos colectores desde el momento en el que el Instituto Geológico Minero estuvo investigando» y que «están sacando ese gas a la superficie aunque no al ritmo apetecible», aunque sí «están aliviando la bolsa de gas y la presión interna».
Este nuevo colector «al ser de mayor diámetro lo que va a provocar es que en lugar de en ocho años se saque el gas en cuatro meses, pero la presión ya desde el primer momento se está aliviando», ha asegurado.
El llamado ‘lago asesino’ es un laguna artificial situado en la Corta Guadiana, en las antiguas minas de Puebla de Guzmán, que mantiene en su fondo unos 80.000 metros cúbicos de dióxido de carbono (CO2). Los expertos del Instituto Geológico Minero indicaron que una repentina ascensión a la superficie de esta bolsa de gas podría convertirse en una nube letal para todo ser vivo que se encuentre en los alrededores.