Los trabajos de mejora de estabilidad de la ladera de la carretera provincial HU-6400, de El Granado al Puente del Chanza (Pomarao), así como al arreglo de parte de esta vía de comunicación, que está llevando a cabo la Diputación de Huelva, continúan a buen ritmo y podrían estar finalizados para mediados del próximo mes de julio. La carretera, que une el Bajo Alentejo de Portugal y el Andévalo onubense, se encuentra cortada desde el mes de diciembre tras el desprendimiento de roca en el talud existente junto a la vía como consecuencia de los graves temporales acaecidos en la provincia a finales del pasado año.
Con el objetivo de agilizar los trámites para una pronta apertura al tráfico, desde la Diputación se contrató la obra por procedimiento de emergencia, con lo que se aceleraba el proceso de contratación de forma considerable. En la primera fase de las obras, finalizadas hace ya algunas semanas, se ejecutó un muro de hormigón armado anclado en la coronación del talud.
La segunda y más importante de las fases finalizará la próxima semana y en ella se ha llevado a cabo el movimiento de tierras. En la tercera y última fase se procederá a ejecutar los primeros trabajos en altura, consistentes en la limpieza manual exhaustiva del talud de restos de pequeño tamaño mediante medios de elevación de grandes dimensiones y posterior extendido de malla geotécnica sobre el talud; bulonado o anclaje y fijación de malla geotécnica mediante medios de elevación de grandes dimensiones; así como remates de obra y señalización.
La diputada responsable del área de Infraestructura, Laura Martín, ha recordado que la Diputación de Huelva, desde el momento en el que se produjo el primer desprendimiento, “ha puesto todos los recursos y medios, tanto materiales como humanos, para una rápida y pronta solución”. Es la primera vez, ha manifestado la diputada que “se da en la red provincial este tipo de situación y hemos hecho todo lo posible para agilizar los trámites, comenzar los trabajos en el menor tiempo posible y finalizarlos cuantos antes, pero salvaguardando siempre la seguridad de los vecinos de uno y otro lado de la frontera”.
En este sentido, y tras finalizar la segunda de las fases en los próximos días, se abrirá, en casos excepcionales, un paso alternativo y puntual para los vecinos que lo necesiten, pero siempre en coordinación con la empresa adjudicataria de las obras y en determinados momentos que no supongan un riesgo para la integridad de los usuarios.
La inversión de esta actuación ronda los 500.000 euros y ha sido la propia Diputación de Huelva la que ha asumido el coste total de la obra a la espera de conocer si el Gobierno Central incluye esta actuación en los fondos de emergencia.