Numerosos rocieros isleños se dieron cita el pasado viernes, 23 de febrero, a las puertas de la Casa Hermandad del Rocío de Isla Cristina para el canto de la salve, el primero de esta nueva temporada. Se palpaba en el ambiente las ganas de volverse a congregar a los pies del Simpecado después de casi dos meses en que se suspendió el canto de la Salve.
La primera sorpresa fue el vacío en la Casa, ya que a la carreta se le está acometiendo una serie de arreglos, por lo que en su lugar se ha colocado un pequeño altar que ha gustado mucho a los hermanos, máxime cuando en estas frías noches de invierno el espacio dejado por la carreta ha permitido que el canto de la salve se haga dentro de la Casa y no a las puertas, como es lo habitual.
Y así, a las once de la noche, Ramón Rodríguez ‘El Poleá’, acompañado a la guitarra por Iván Barberi, cantó la salve de la hermandad junto a Sara Cáceres, una rociera que siempre se ha caracterizado por cantar al Simpecado con un sentimiento muy profundo y que, por problemas laborales, llevaba mucho tiempo sin poderse acercar por la Casa.
Luego, como siempre, cuatro sevillanas, a cual más hermosa y con más fervor, cantadas por Ramón y Sara, con las que los sentimientos se colocaron a flor de piel.
El próximo viernes, 2 de marzo, a las 23.00 horas, el grupo ‘Kalandraque’ será el encargado de cantar la salve en la Casa Hermandad de la Plaza de San Francisco.
