La Guarda Civil ha confirmado este lunes la detención en un hombre, encargado en una finca de Aljaraque, acusado de presuntos abusos sexuales, este pasado viernes.
La denuncia ha sido puesta por cuatro trabajadores temporeras españolas, que habían sido contratadas a través de una empresa de trabajo temporal para recoger arándanos, y la diligencias efectuadas sobre este caso por la Guardia Civil han sido trasladadas al juzgado de instrucción número 5 de Huelva.
El hombre ha sido puesto en libertad tras ser presentado ante el juez y acogerse a su derecho a no declarar, aunque el juez le ha impuesto como medida cautelar el que no podrá acercarse a las mujeres denunciantes a menos de 100 metros.
Con este caso, son ya tres los hombres investigados en relación a presuntos casos de abusos sexuales en campos freseros de la provincia de Huelva.
Según publica en Facebook el director de la Asociación Arrabales en Huelva, Federico Pérez, «los hechos salen a la luz por una de las chicas, que comenta a sus compañeras que el encargado de cuadrilla la manosea, acaricia, le da breves masajes y frota sus genitales contra ella, asegurándole que ya no tendría que abandonar la empresa y, bajo amenaza de expulsión por bajo rendimiento si hablaba del tema. En dicha conversación otras compañeras reconocen pasar por esa misma situación y denuncian el caso ante los juzgados. Cabe destacar, que la empresa agrícola y la empresa de trabajo temporal han colaborado en todo momento para esclarecer los hechos, repudiando dichas actuaciones, si se confirman».
REACCIONES
«Hay que ser prudentes ante la investigación abierta». Esta ha sido la primera reacción del consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Rodrigo Sánchez Haro, que no obstante ha querido lanzar el mensaje que desde que se conoció la primera denuncia se repite con la administración andaluza: uno, que no puede criminalizar a todo un sector por unos casos aislados y dos, que condena cualquier tipo de abuso.
ASAJA HUELVA
La organización Asaja Huelva ha emitido un comunicado en el que asegura:
- Su rechazo y condena ante cualquier tipo de maltrato, abuso o actitud inapropiada, tanto en el plano laboral como en el personal, que haya podido producirse en el ámbito agrícola y que sea demostrada por las autoridades policiales y judiciales en el transcurso de una investigación adecuada en el marco del Estado de Derecho. Para Asaja-Huelva, cualquier persona que cometa un acto de estas características y cuya actitud quede convenientemente probada, no tiene sitio en la sociedad.
- Su rechazo y su repulsa, del mismo modo, hacia las campañas claramente orquestadas por entidades que pretenden medrar políticamente a costa de estrategias de dudosa intencionalidad, con el único propósito de ensuciar el nombre de un sector integrado por miles de personas y la honorabilidad de estas y sacar de ello los réditos deseados. Si el SAT o cualquier otro ente aspira a participar en la configuración y la regulación de un sector como el de los frutos rojos de Huelva, lo que debe hacer es acceder a una representación suficiente con limpieza e integridad, por medio de los mecanismos que habilita para ello la legislación sociolaboral de nuestro país. La demagogia, la generalización de actitudes que en todo caso serían puntuales, la difamación y la propagación de injurias y calumnias aprovechando la sensibilidad social hacia el colectivo de los trabajadores y la condena pública de personas sin que existan pruebas, suponen prácticas reprobables sobre las que Asaja-Huelva tomará las medidas que considere oportunas.
- Del mismo modo, Asaja-Huelva considera intolerable la publicación de titulares y reportajes cargados de morbo e información sesgada, en los que se ofrecen datos sin contrastar, basados exclusivamente en la narración de personas que en muchas ocasiones ni siquiera desvelan su identidad y que, por lo tanto, no se puede comprobar si su historia es cierta o no. Este tipo de prácticas ocasionan un daño irreparable al sector, pero más allá, manchan inopinadamente el buen nombre de las personas y causan un tremendo dolor en su entorno familiar y social. Por ello, la organización agraria hace un llamamiento para que el trabajo informativo sea, como establece el código deontológico de la profesión, responsable, veraz, objetivo y que se guarde el debido respeto a la presunción de inocencia.
- Como parte integrante de la mesa negociadora del Convenio del Campo de la provincia de Huelva, junto a las centrales sindicales CCOO y UGT, como entidades junto a Asaja-Huelva mayoritarias en su representatividad dentro del sector, la organización agraria lleva décadas debatiendo y cerrando acuerdos en un ambiente de cordialidad y flexibilidad por parte de todos los entes negociadores. Fruto de ello es un convenio -que en este momento se encuentra en periodo de negociación en tiempo y forma-, que ha incluido algunas de las condiciones más innovadoras y socialmente punteras del panorama laboral agrícola español.
- Igualmente, Asaja-Huelva participa e incluso lidera desde su creación entes de participación y negociación como la Comisión de los Flujos Migratorios, entre cuyas funciones se encuentra la de regular el proceso de contratación de trabajadores extranjeros en origen. En su seno se determinan, ejercicio a ejercicio, las condiciones que deben cumplir tanto los trabajadores como las empresas que deseen acceder a este sistema, que por otra parte ha demostrado a lo largo de los años su eficacia y su seguridad para todas las partes.
- Además, existen mecanismos y herramientas que el ordenamiento administrativo y jurídico de nuestro país establece para velar por el cumplimiento de los compromisos adquiridos dentro de las mesas de negociación del Convenio del Campo y de la Comisión de los Flujos Migratorios, entre otras. De esta última cabe destacar la amplia representatividad de su composición, entre la que se encuentran desde organizaciones sectoriales a administraciones públicas, pasando por ONG´s y centrales sindicales. Además, las administraciones públicas realizan inspecciones periódicas en las explotaciones agrícolas para comprobar el buen funcionamiento de las campañas y la Guardia Civil habilita incluso un operativo especial para el mismo fin.
- Por otro lado, Asaja-Huelva considera que la administración tiene la obligación de proteger al sector agrícola de ataques como los que viene sufriendo y que, por otro lado, no son una novedad. El sector agrícola onubense, especialmente el productor de frutos rojos, es un pilar fundamental de la economía onubense, creador de riqueza y empleo. Tanto es así que cuando sobrevino la crisis, la administración no dudó en solicitar la colaboración de este sector, y el sector, por su parte, no dudó en prestar su apoyo en lo que estuvo en su mano. Por ello, la asociación y las dos centrales sindicales, UGT y CCOO, mantuvieron una reunión hace unos días y conformaron una mesa de trabajo que, entre otras cosas, tiene como objetivo solicitar un encuentro con la administración para exponer la situación y solicitarle que establezca las medidas de protección que sean convenientes en este caso.
- Por lo tanto, y aunque en un sector en el que participan miles de personas cabe siempre la posibilidad de que se produzcan situaciones indeseables que deben ser combatidas con dureza, el sector agrícola onubense de los frutos rojos es un sector ejemplar y vanguardista en todos los aspectos y Asaja-Huelva, al igual que, insistimos, condenará cualquier tipo de abuso probado por las autoridades judiciales, también defenderá con vehemencia al colectivo y no consentirá que se manche su buen nombre ni se ataque a sus integrantes con intenciones espurias desde la manipulación y la cobardía.