La Plaza del Salvador, conocida popularmente como “El Solá”, ha servido de escenario a la I Exposición de Pintura al Aire Libre “Curro el de La Villa”, que se ha celebrado este sábado de la mano de la Asociación Juvenil “El Solá” y la Hermandad de la Buena Muerte de la localidad fronteriza, y cuya organización ha contado con la colaboración el Ayuntamiento.

El alcalde de la ciudad, Alberto Fernández, acompañado por diversos miembros de su equipo de gobierno, fue el encargado de inaugurar esta muestra que rinde homenaje al fundador de esta asociación de jóvenes que desarrolla una intensa labor a lo largo de todo el año y que se presenta como una interesante actividad dinamizadora del barrio más antiguo de la ciudad. El inolvidable Curro fue, además, el precursor de las exposiciones pictóricas que se celebran cada verano en la ermita de San Sebastián, en el barrio alto de la ciudad.

El primer edil local elogió esta iniciativa señalando “que es otra actividad más que se organiza en torno a esta emblemática plaza, sin duda uno de los lugares más hermosos y mágicos de Ayamonte”. Fernández, que felicitó a la organización de la exposición por este nuevo proyecto, destacó, asimismo, “la colaboración de los artistas participantes en este encuentro de pintura al aire libre, que es una muestra más de la generosidad de nuestros pintores y de su deseo de contribuir a la dinamización de nuestra ciudad”. El alcalde añadió que “Ayamonte se ha convertido en la ciudad referente en el ámbito cultural y artístico en nuestra provincia y en el principal foco de atracción turística, por la incesante y atractiva actividad que registra de manera constante”, al tiempo que invitó a los ciudadanos y a cuantos nos visitan a disfrutar de la intensa actividad que se desarrolla en el municipio costero a lo largo de todo el año y, de manera especial, a lo largo del verano.

Por su parte, la organización agradeció la ayuda prestada por el Ayuntamiento y deseó la continuidad de esta muestra que, en su primera edición, ha contado con la participación de treinta y dos pintores y setenta y siete obras. La exposición, que dio comienzo en torno a las nueve de la noche, se prolongó hasta la madrugada rodeada de una extraordinario ambiente.