El coordinador provincial de Izquierda Unida en Huelva, Rafael Sánchez Rufo, ha acusado al consejero de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía José Fiscal de “actuar siempre tarde, mal y a instancia de terceros en la vigilancia sobre el cumplimiento de la normativa ambiental en el vertedero de Nerva”.
Tuvo que ser una denuncia presentada ante el SEPRONA en el mes de abril por Izquierda Unida, Equo y Ecologistas en Acción a raíz de la aparición de una espuma densa en el cauce del Río Tinto la que alertara a la Junta de Andalucía de lo que es una evidencia desde hace tiempo, la existencia de lixiviados de las balsas del vertedero al cauce del Río Tinto.
En dicha denuncia se puso en alerta a las autoridades de la presencia de balsas sin acondicionar que se conectan con canales perimetrales que dan a parar al río y vierten en el los residuos. Al mismo tiempo se señalaba que estos vertidos no son ni puntuales ni casuales y llevan tiempo produciéndose. Ante esta situación la administración andaluza es absolutamente incapaz de resolver el problema de los vertidos incontrolados a los cauces de los ríos de la provincia.
En base a esto Izquierda Unida reclamará de la Junta de Andalucía tener conocimiento del expediente sancionador abierto ahora por la Consejería de Medio Ambiente para saber el alcance de exigencia en la depuración de responsabilidades a la empresa.
En este sentido, Sánchez Rufo señala que lo acontecido en torno al vertedero de Nerva “confirma lo que venimos denunciando desde hace años, que el Vertedero está colmatado, es una gran amenaza ambiental para la provincia de Huelva y para toda la comarca de la Cuenca Minera, y por tanto debería estar cerrado y que se deben acometer las medidas necesarias de restauración ambiental de la zona”.