Nazario Luque, el mítico dibujante del underground hispánico, impartió este jueves una conferencia en la Universidad de Huelva en la que hizo un repaso sobre el movimiento libertario que se dio en la Barcelona en los años 70, en el que él mismo participó de manera activa.
Ante un numeroso público que se dio cita en el salón de actos de la Facultad de Educación, el artista, natural del municipio sevillano de Castilleja del Campo, explicó cómo tuvo que marchar a Barcelona para poder publicar sus historias, para lo que montó una comuna junto a otros dibujantes y fotógrafos desde la que crearon su propia revista, ‘La piraña divina’, en la que Nazario no se sometía a ninguna censura, hasta que, tras venderla en un festival de rock en el año 75, tuvieron que dejarla tras percatarse de que la Policía buscaba a los autores de la publicación.
Todo cambió con la llegada de la transición, que fue “esencial” para que se diera el movimiento libertario que se produjo en la Barcelona de la época, con el que “se creó un ambiente que hizo de Barcelona algo único y que sirvió de base para lo que después fue conocido como la movida madrileña, que ya se había hecho en Barcelona”, explicó.
Para el reconocido dibujante, que acaba de sacar a la luz su último libro, ‘Sevilla y la casita de las pirañas’, aquel movimiento libertario originó “una sensación de libertad que hasta entonces no se había visto”, hasta el punto de que, recordó, durante el I Festival Libertario de Barcelona, él mismo mostraba su homosexualidad en el escenario. Había comenzado el movimiento homosexual en España, así como el feminista y el ecologista, destacó.
Tras la conferencia, el púbico tuvo la oportunidad de conversar con el artista en este ‘Encuentro con Nazario’ organizado por el Fondo Uberto Stabile, alojado en la Facultad de Humanidades, en colaboración con el Centro de Investigación en Patrimonio Histórico, Cultural y Natural (CIPHCN) y la Universidad de Huelva (UHU)
La vicedecana de Comunicación Exterior, Extensión Cultural y Estudiantes de la Facultad de Humanidades, Margarita García Candeira, que abrió el acto y dio la bienvenida a los asistentes, destacó la “gran cantidad de cabeceras de los años 70, 80 y 90” con la que cuenta el Fondo Uberto Stabile, sobre el que resaltó que está “abierto a la consulta de todo el mundo, no sólo de universitarios ni investigaciones”, tras lo que subrayó la importancia de contar ese día en la UHU con un artista como Nazario Luque que fue “testigo y cronista” de aquella época.
A continuación, el propio escritor onubense Uberto Stabile agradeció a la Universidad que acogiese el Fondo que lleva su nombre y calificó a Nazario Luque como “uno de los padres de la contracultura” que originó esta iniciativa constituida por más de diez mil volúmenes ligados a movimientos alternativos de las últimas décadas y que atesora algunas de las cabeceras que publicaron los diseños nazarianos, como El Víbora, Frigidaire, El Europeo y Primera Línea.
Sobre Nazario
Nazario es uno de los artistas más destacados de la contracultura española de las últimas décadas. Su carrera transcurre entre Sevilla, de donde es originario, y Barcelona, a donde se traslada en 1972. Allí pone en marcha, junto a Mariscal, Farry y Pepichek, el cómic El Rrollo, edita el fanzine La Piraña Divina, que le causará problemas con la policía, y se hace un hueco en numerosas revistas nacionales e internacionales como It, Frigidaire o Gai Pied. Dibuja la portada del primer número de la revista El Víbora, en la que desarrollará la célebre serie “Anarcoma”, que narra las historias de un detective travesti y por la que se hará famoso entre un público amplio. Lou Reed colocará, sin permiso, un dibujo de Nazario como portada de su disco Live: Take no prisoners (1978), lo que ocasionará un pleito que ganará el artista sevillano algunos años después.
Sus obras se caracterizan por un acercamiento irreverente a los tópicos de la cultura andaluza, que se divierte en subvertir, y por un retrato de los bajos fondos barceloneses que explota todas las modalidades del grotesco, como testimonia el volumen La Barcelona de los 70 vista por Nazario y sus amigos.
La transgresión de todos los tabúes y decoros sexuales es también una constante, como prueban su obra La visita, primer cómic abiertamente gay editado en 1975, y Alí Babá y los cuarenta maricones. Se ha interesado también por reescribir historias de mujeres de la literatura y la mitología en Mujeres raras.
La trayectoria de Nazario ha recibido múltiples reconocimientos, entre los que se encuentra la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, que compartió con el recién fallecido Ceesepe en 2011. Su obra ha sido expuesta en ARCO y en antológicas en las principales ciudades españolas, y parte de ella ha sido adquirida por el Centro Reina Sofía y por el Centro Andaluz de Arte Contemporánea (CAAC). Nazario ha publicado sus memorias con los títulos de La vida cotidiana del dibujante underground (2016) y Sevilla y la Casita de las Pirañas (2018).