Llegó el día y la hora. El salón de plenos del Ayuntamiento de Huelva acogerá este jueves 27 de diciembre otra de las fechas marcadas en rojo para el presente y futuro más inmediato del Recreativo de Huelva. En una sesión extraordinaria en la que el equipo de gobierno municipal ha propuesta un plan de rescate para el club decano de 3’8 millones de euros, la decisión está en manos de los grupos de la oposición, que decidirán si votan afirmativamente a esa propuesta, en contra o simplemente se abstienen para que pueda salir hacia delante lo que diga la mayoría. En juego está la supervivencia del club, ya que con este dinero la intención es poder pagar los atrasos de nóminas a empleados, futbolistas y cuerpo técnico de la entidad, ex-empleados, pagos a Haciedad y Federación Andaluza y otros asuntos ineludibles en las próximas fechas.
Dicha cantidad viene fijada por un estudio independiente de la consultora AFI que firma el economista César Cantalapiedra López. Tras analizar la situación económica del club, concluye que la intervención directa del Ayuntamiento es la única alternativa para evitar la disolución ó liquidación a corto de plazo de la sociedad.
Izquierda Unida, Participa Huelva, Ciudadanos y Mesa de la Ría ya han adelantado que votarán en contra de este plan de rescate, ya que entienden que es ilegal y que existe un informe del interventor que es contrario a esta medida, a la que vez que insisten en la alternativa de poner en venta de nuevo el club lo antes posible. Por su parte, el Partido Popular sigue dejando en el aire su decisión y lo decidirá en unas horas y el PSOE votará a favor, quedando en el aire la decisión de los dos concejales no adscritos (Enrique Figueroa y Ruperto Gallardo), amén de que pueda haber alguna extraña ausencia de algún concejal para no tener que votar.
Si el plan de rescate del equipo de gobierno municipal no sale hacia delante, el club se vería abocado a una situación económica y financiera asfixiante y varios de los futbolistas de la primera plantilla ya han anunciado privadamente que rescindirían sus contratos en enero al debérseles más de tres nóminas, con lo que el equipo se podría quedar gravamente perjudicado, amén del club, que seguiría sin poder hacer frente a los pagos más inmediatos de nóminas y pagos a proveedores y entes oficiales. Si sale hacia delante, se pondría al día a trabajadores, futbolistas y ex empleados, además de hacer frente a los pagos más inmediatos de la entidad, con lo que esta temporada al menos no debería haber más problemas económicos.