La Mancomunidad de Desarrollo Condado de Huelva entregó ayer en la Casa de la Cultura de Niebla los Premios Elena Whishaw, unos reconocimientos que se conceden a mujeres y entidades de la comarca por su contribución a la igualdad entre hombres y mujeres. El objetivo de la entidad es visibilizar la labor de las mujeres de la comarca en distintos ámbitos: profesional, empresarial, científico, político o sindical y social.
En este sentido, Juan Antonio García, presidente de la Mancomunidad, explicó durante la inauguración del acto que “en esta institución tenemos claro que no podrá haber progreso social si no se reconoce el talento y la capacidad de las mujeres en los diferentes campos de la sociedad, así como su contribución al desarrollo económico y social”. Por su parte, la alcaldesa de Niebla, Laura Pichardo, agradeció la labor que realiza la Mancomunidad desde hace más 28 años en materia de igualdad y recordó la figura de Elena Whishaw, una mujer que “nos sirve como referencia para resaltar el papel de muchas mujeres que destacan en distintos ámbitos y a las que es necesario hacer visibles para que las generaciones futuras crezcan con referentes femeninos”.
Como cada año, la gala comenzó con una conferencia sobre una mujer relevante de la comarca y, en esta ocasión, la protagonista fue Candelaria Coronel, una almonteña que consagró 35 años de su vida a la educación de las mujeres de su pueblo. Para ello, el presidente de la Asociación para el Fomento del Conocimiento en Almonte, Francisco José Pérez Díaz, ofreció la ponencia “Candelaria Coronel, la educación como vector de transformación de una comarca”.
Tras la presentación, comenzó la entrega de premios. La primera galardonada fue la villalberaMª Paz Carrasco González, una empresaria que comenzó su andadura con un pequeño taller de costura en su municipio y que, poco a poco, ha ido abriéndose camino en el campo de la confección de trajes de flamenca hasta conseguir prestigio a nivel nacional.
La siguió Elena Correa Vera por su trayectoria profesional. Esta periodista chucenera, que actualmente trabaja en RNE, ha sabido abrirse un hueco en el mundo del periodismo tras desarrollar su labor en distintos puntos de la geografía española.
El reconocimiento en el ámbito sindical fue para la villarraseraEstrella López de la Rosa. Esta trabajadora de ayuda a domicilio desarrolla una importante labor defendiendo los derechos laborales de las trabajadoras de este campo profesional en la comarca del Condado de Huelva.
El siguiente premio fue entregado a Rocío Maury López por su labor social. Esta abogada moguereña ha trabajado en campos de voluntariado con personaa migrantes y ha constituido la asociación M-Solidaria en su municipio para fomentar la convivencia pacífica intercultural entre los onubenses y la población inmigrante.
El reconocimiento en el ámbito científico fue para Ana Rocío Conde Moro, una psicóloga lucenera que se ha especializado neurociencia y que ha dedicado buena parte de su vida académica y profesional a la investigación en este campo. Además, destaca por su esfuerzo por hacer la ciencia más accesible y cercana a la ciudadanía.
La entidad ganadora del Premio por su contribución en materia de igualdad entre hombres y mujeres recayó este año en el grupo de teatro de la Asociación de Mujeres Abril de Escacena del Campo, por ser un ejemplo de trabajo colectivo centrado en la lucha por la igualdad, en la denuncia de la violencia ejercida contra las mujeres y en la dignificación del papel de las mujeres en el mundo rural.
Por último, desde el pasado año también se entrega un galardón a una mujer por su trayectoria vital y en esta ocasión la premiada fue la bonariegaSebastiana Prieto Romero, por toda una vida defendiendo los derechos de las mujeres en diferentes ámbitos, principalmente en el asociativo y en el político.
