La planta de 46 MW con biomasa que Ence Energía y Celulosa construye en Huelva ha iniciado la última fase de pruebas de todos los equipos, ultimando así los preparativos para su puesta en marcha a finales de este año.
En este importante hito en el desarrollo del proyecto, se energiza la línea y el transformador principal que une la nueva instalación con el parque de alta tensión a fin de poder conectar la planta a la red eléctrica general.
El proyecto de Ence comienza, así, la fase previa a la puesta en marcha definitiva, después de obtener el Acta de Puesta en Servicio Provisional para probar todos los equipos de la nueva planta, incluida la caldera de biomasa y turbina de vapor; unas operaciones que se desarrollarán a lo largo los próximos meses.
Así, tras la energización de la línea, el próximo paso será encender la nueva caldera con biomasa y, con el vapor producido, alimentar y sincronizar la turbina que da a la planta una capacidad de exportación a la red de 299.000 MWh, suficientes para las necesidades de consumo eléctrico de más de 55.700 personas.
El objetivo principal de esta última etapa del proyecto es comprobar y verificar, no sólo los equipos principales, sino también las instalaciones auxiliares como sistemas de aire comprimido, torres de refrigeración y sistemas eléctricos y de instrumentación, entre otros. Es, por tanto, una fase que se prolongará durante varios meses, dependiendo de la evolución y resultados de las distintas operaciones que hay que realizar.
La nueva planta ha sido construida con las Mejores Técnicas Disponibles recomendadas por la UE para la producción de energía con biomasa, situándola como un referente de la generación de alta eficiencia y baja emisión y reforzando la apuesta de Ence por la excelencia ambiental. Además, para su funcionamiento la planta consumirá biomasa agrícola y forestal residual procedente de los cultivos agrícolas de los alrededores y del monte onubense. De esta forma, contribuirá a reducir las quemas incontroladas en el campo y colaborará en reducir el riesgo de incendios forestales, entre otros beneficios sociales y ambientales.
La puesta en marcha de la planta de 46 MW a finales de año elevará la capacidad instalada del complejo energético onubense de Ence de 91 a 137 MW, con lo que también aumentará su capacidad productiva a más de 890.000 MWh anuales.