Desde siempre se ha creído que el secreto de una empresa de éxito es ofrecer productos útiles e innovadores. Lo cierto es que estos dos componentes son clave, indispensables, pero, por sí solos, no son suficientes. Si antiguamente, el boca a boca en el barrio, entre los vecinos, era el mejor método para difundir y dar a conocer los productos y servicios de pequeños negocios, hoy en día, en plena globalización, metodologías como esa se han quedado limitadas. No obstante, su necesidad no ha desaparecido y por ello tenemos a nuestro alcance herramientas de marketing que, como es el caso de Mailrelay, funcionan de manera más potente, a una escala mucho más elevada y universal.
¿Qué ventajas aporta el marketing a una empresa?
Aunque mucho se habla del marketing y la publicidad no siempre somos conscientes de su funcionalidad y de las ventajas que este ofrece. Se trata de un área que no es ajena al reto de áreas de la empresa, sino que es, de hecho, un aspecto transversal a todas las demás ya que es aplicable a cada una de ellas. Además de reforzar y dar a conocer los servicios que una empresa posee, permite detectar nuevos productos y estudia la manera más efectiva de introducirlos en el mercado.
Así mismo, el marketing es el puente que permite la comunicación entre una empresa y sus clientes. Por un lado, el marketing actúa para fidelizar a esas personas que ya hacen uso de ellas, pero también se focaliza en la búsqueda de nueva clientela, aumentando así los resultados de dicho negocio a largo plazo. El marketing se posiciona, así como una pieza clave en cuanto a la rentabilidad del negocio se refiere. Por otra parte, y teniendo en cuenta la competitividad de ciertos sectores, el marketing ofrece la posibilidad de que una empresa destaque en el mercado, frente a otras que elaboran productos similares, situándola entre las mejor posicionadas.
Campañas de marketing: comunicándonos con miles de clientes
El campo del marketing ha ido evolucionando y reinventándose a un ritmo vertiginoso. Por eso hoy en día, cuando echamos un ojo a las posibles estrategias que podemos aplicar en nuestra empresa, encontramos que hay tantas como herramientas a nuestra disposición. En este sentido, si lo que buscamos es dar a conocer nuestros productos y conseguir una clientela sólida de manera fácil y rápida, las campañas de mailing son una de las herramientas más empleadas.
Su objetivo es precisamente ese: con tan solo un clic, poder comunicarnos con nuestros clientes informándoles de los productos que ofrecemos y pueden interesarles. Poner en práctica una campaña de este estilo no es complicado, al contrario, es un proceso muy intuitivo. Para ello, es necesario simplemente tener en cuenta ciertos factores como:
- Emplear herramientas creadas específicamente para ello.
- Trasmitir nuestro mensaje de manera sencilla y, sobre todo, cercana con nuestros interlocutores.
- Facilitar información interesante para nuestro público, evitando generar spam.
- Ser claros en la redacción del asunto del mailing.
- Calendarizar las fechas y horas de envío, eligiendo aquellos más efectivos.
- Actualizar nuestra base de datos con cierta frecuencia.
