Tener un coche es una ventaja muy grande para la familia porque ofrece mayor confortabilidad, estatus y también permite ahorrarse las molestias que se generan al utilizar los servicios de transporte público, pero ¿qué pasa cuando solo tenemos posibilidades de adquirir un coche de segunda mano?

Los coches segunda mano son una opción excelente cuando no se cuenta con los recursos suficientes para adquirir uno de Km0 o de agencia, o sí se tiene pero se prefiere aprovechar el dinero para otra cosa. En todo caso, el tema no es si se trata o no de un coche de segunda mano, sino en el trabajo que hagamos nosotros para validar si será una buena compra.

Aunque no seamos especialistas, sí que existen muchas herramientas que facilitan la tarea en este sentido, como los sitios web enfocados a servir como escaparate digital para distintos tipos de anuncios y, desde allí, determinar qué modelo se ajusta a nuestras necesidades y presupuesto.

Pasos para realizar una correcta selección

A la hora de trabajar en toda esta materia, muchas personas se pueden sentir confundidas por la gran cantidad de ofertas que existen. Sin embargo, éste es un buen momento para ponerse manos a la obra, para ello, se deben tener en cuenta una serie de pasos como los siguientes.

Paso nº 1: comparación entre modelos

Realizar una sencilla comparación entre modelos será una actividad que nos permitirá acercarnos al coche ideal. A veces cuesta mucho decidirse por uno en particular, así que lo primero que podemos hacer es definir lo que no queremos, ya sea como razón la marca, la cantidad de plazas, la cantidad de puertas, el tipo de motor, el tipo de combustible, entre otros. Tener todo esto bien definido nos ayudará a descartar una buena cantidad de opciones.

Después, se puede pensar en otros aspectos entre el catálogo de alternativas que nos quedan, como los que tienen que ver con el año de fabricación o el precio que propone el vendedor, entre otros. Con reducir las alternativas a 4 o 5 opciones podremos estar más que satisfechos.

Sin embargo, es indispensable aquí poner atención también a todos los aspectos que tienen que ver con el área administrativa y de titularidad del coche, como la cantidad de dueños que tuvo con anterioridad, por ejemplo. También es clave verificar si está autorizado para moverse con libertad por el país, el tiempo de vigencia que presenta la ITV, si tiene algún tipo de cargo o gravamen, entre otros ítems que pueden ser decisivos para poder elegir el vehículo o no para su compra.

Paso nº 2: simulaciones de financiación

Ya después de haber valorado los posibles coches, viene el momento de atender al tema del dinero y de realizar un estudio comparativo de las posibilidades de financiación. Es importante aquí tener en cuenta cada aspecto para no poner en riesgo nuestra economía bajo ninguna circunstancia.

Lo bueno de los simuladores es que te muestran fielmente los pagos a realizar en el presente y lo que podrías esperar en el futuro, para así proyectar mejor tus gastos mensuales y las posibilidades reales de poder devolver el compromiso según tus ingresos.

Paso nº 3: valorar el seguro para el coche

Tener un coche sin seguro es un acto irresponsable que además podría traer consecuencias legales, por ende, es un buen plan incluir dentro de todos los gastos que éste traerá, el tema del seguro del coche. Existen muchas empresas que los ofrecen y que tienen modalidades que muy probablemente se ajusten a las condiciones particulares de cada persona, por lo que vale mucho la pena prestar atención a ello.

Cuando las compras se realizan a través de un sitio profesional como un concesionario, se tienen mayores probabilidades de obtener un coche en excelente estado, pero en caso de no ser así, es muy importante trabajar el tema a través de un sitio web que sea fiable y que pueda dar respuestas a cualquier consulta que se realice.