La reapertura del monumento triguereño tendrá lugar el próximo sábado 4 de julio presentando una serie de novedades importantes en el protocolo de visita que estará adaptado a las nuevas exigencias.
El Ayuntamiento de Trigueros ha mantenido en este último mes sendas reuniones con la Delegación Territorial de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía en Huelva a fin de poder establecer todas las líneas de trabajo en cuanto a la reapertura del megalito. Finalmente, y a expensas de poder ampliar próximamente el horario a los días entre semana, será el Ayuntamiento de Trigueros quién lleve a cabo la reapertura del dolmen los sábados y domingo.
Las personas interesadas en realizar la visita deberán conseguir las entradas previamente. Para ello, y como principal novedad, deben entrar en www.giglon.com donde podrán elegir el día de visita y la hora. Hasta nueva orden, sábado y domingo de 10:00 a 14:00 h (cierre de puertas a las 13:30 h). Cada día se establecen 3 turnos de visita: a las 10:30, 11:30 y 12:30 h. y en cada turno un máximo de 7 personas, cumpliendo el 50% del aforo establecido. Una vez se vaya a pasar al interior del Dolmen el acceso se hará de manera individual. En el caso de unidades familiares, con un máximo de dos personas por turno. La entrada al recinto será de entre 10 a 5 minutos antes de la hora concertada.
Irene Montiel, concejala de cultura y turismo del Ayuntamiento de Trigueros: “Hasta que no hemos establecido todos los protocolos y medidas de seguridad exigidas por las diferentes autoridades de manera coordinada con la Junta, no hemos querido aventurarnos a abrir el Dolmen a la visita pública. Desde el Ayuntamiento de Trigueros hemos realizado un trabajo de adaptación y cambios en el protocolo de visita que ha sido bien recibido por la Delegación Territorial y que se continuará en un futuro a pesar de las circunstancias excepcionales que atravesamos, ya que no mira más que por el beneficio propio del monumento y por garantizar su estado de conservación”.
En la visita al Dolmen será obligatorio el uso de mascarilla desde la entrada al recinto monumental, así como la desinfección de manos y seguir un itinerario establecido de visita, entre otras medidas de seguridad. Ya en el interior, en la galería del dolmen, se llevará a cabo una normativa mucho más estricta que la habitual en cuanto al respeto a los elementos que lo integran y el modo de visita.