El Partido Popular de Nerva ha anunciado este viernes la puesta en marcha la campaña de recogida de firmas ‘Súmate a Nerva, vertedero o dignidad’, que van a realizar por toda la provincia de Huelva, para solicitar a la Consejera de Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía la desestimación de la Autorización Ambiental Integrada solicitada por Ditecsa para ampliar el vertedero, así como una fecha para el cierre de las instalaciones.
Además, en dicha petición a la Junta se incluye la desestimación del Proyecto de Planta de Tecnosuelos que la empresa Green Solutions S.L. pretende instalar en la localidad de Minas de Riotinto.
El Portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Nerva, José Antonio Lozano, ha manifestado que desde el Partido Popular de Nerva están muy ilusionados y esperanzados en que esto sea determinante para conseguir la fecha para el cierre de las instalaciones. «Nerva no puede seguir soportando indefinidamente un vertedero a 700 metros de sus casas, por lo que vamos a hacer todo lo posible para que la Junta desestime el Proyecto de Ampliación que pretende, además, instalar una Planta de Tecnosuelos y otra planta con una chimenea de 10 metros de altura».
Desde el PP de Nerva han informado que recorrerán toda la provincia con una mesa informativa, anunciando previamente su ubicación, «recogiendo firmas de todos los que quieran apoyarnos en esta causa justa», al tiempo que subrayan que «esto no es sólo un problema de Nerva y la Cuenca Minera, sino que afecta a muchos otros pueblos de la provincia, por ejemplo, los bañados por el río Tinto, pues los vertidos van al río, y todos aquellos pueblos que tienen el hospital de Riotinto como hospital de referencia, pues la pestilente Planta de Tecnosuelos irá ubicada a escasamente varios centenares de metros del hospital».
Para finalizar, Lozano ha recalcado que «es el momento de sumarse a Nerva, sumarse a una causa justa donde se pone la dignidad de un pueblo y una comarca por encima de los intereses económicos de algunos que se están enriqueciendo a costa de sacrificar el futuro de un pueblo donde ya a mediados del siglo XV ya se instalaron sus primeros vecinos».