La 36 edición del Festival de Teatro y Danza Castillo de Niebla ha finalizado con un balance muy positivo, a la luz de los llenos de los espectáculos -dentro de los aforos permitidos por la situación de pandemia- y la entusiasta crítica del público ante las diferentes funciones. Así lo ha asegurado el vicepresidente de la Diputación, Juan Antonio García, quien ha indicado que tras la suspensión del verano pasado “hemos podido disfrutar este verano de una edición del Festival marcada, como no podía ser de otra forma, por las medidas de seguridad para prevenir los contagios del coronavirus”.
Con un formato un poco más reducido que en ediciones anteriores, el Castillo de los Guzmán ha acogido siete días de actividad, con un total de diez espectáculos entre los dos programas que se han desarrollado: la programación principal -con seis funciones- y Atrévete, con cuatro actuaciones en una sola tarde. Como actividad complementaria se ha desarrollado la exposición Alma de teatro en la Casa de la Cultura de la localidad iliplense, con fotografías de María Clauss.
“Casi 2.700 personas han acudido a ver las actividades del Festival, sin contar la exposición. 2.300 de ellas han acudido a las 6 actuaciones de la programación principal, lo que supone el 41 por ciento del aforo del espacio, dentro de los márgenes estadísticos que suponía cumplir las normas de seguridad aprobadas por la Junta de Andalucía para el nivel 3, que era el que tenía Niebla cuando se activó la venta”, ha explicado García.
La venta se activó estando Niebla en nivel 3 y eso suponía permitir hasta 6 entradas juntas, dejar una distancia de seguridad de dos localidades libres entre grupo de venta y no ocupar las localidades inmediatamente anterior ni posterior de cada fila de butacas. Con estos parámetros matemáticamente la ocupación podía descender a un 38 por ciento de la capacidad normal del espacio, siendo el parámetro esperado entre el 41 y el 43 por ciento.
Todas las funciones de la programación principal se han llenado con excepción de Elektra.25 que se celebró en la semana en que se anunció que Niebla tenía una tasa de incidencia de 1.000 casos, lo que influyó en que no se completara por poco el aforo máximo permitido.
Según el vicepresidente, el mejor sensor para detectar la calidad y aceptación de los espectáculos es la reacción del público “y todas las funciones han levantado en aplausos a los asistentes al patio del Castillo de Niebla, destacando los mas de cinco minutos de aplausos a Viva!, el espectáculo que cerró este sábado la programación del Festival”.
La excepcional acogida de Atrévete motivó que se celebraran dos pases de la velada de circo al escenario principal, para que pudiese entrar el máximo público posible. De esta forma se duplicó las personas asistentes: se esperaban 200 personas entre los dos pases para el espacio inicialmente previsto, una de las barbacanas laterales del castillo, siendo el número final de 450 personas.
Para la alcaldesa de Niebla, Laura Pichardo, “después de un año de parón el balance es súper positivo. Empezamos esta edición con las restricciones del nivel 3 y poco a poco hemos conseguido el lleno de los espectáculos y con la sensación de que nos hemos quedado cortos, ya que mucha gente se ha quedado sin entradas, lo que dice mucho de la calidad del Festival”. La alcaldesa ha felicitado a la organización del certamen por traer “lo mejor de lo mejor en una programación que no ha dejado indiferente a nadie”, y ha asegurado que gracias al Festival “Niebla durante el verano es otra, con todo completo, y con muchas personas del pueblo trabajando, desde acomodadores a planchadoras, aparte de todos los negocios de hostelería”.
Accesibilidad del Festival
Este año, la 36 edición del Festival de Teatro y Danza Castillo de Niebla ha sido accesible para personas con discapacidad física y sensorial. Tanto el espacio como parte de la programación teatral han contado con medidas de accesibilidad y apoyo a la comunicación que han facilitado el acceso y disfrute del festival a las personas con discapacidad en igualdad de condiciones.
Tres de las obras han contado con audiodescripción para personas con discapacidad visual, subtitulado adaptado y bucle magnético para personas con discapacidad auditiva, y amplificación del sonido para aquellos espectadores con pérdidas auditivas o que sencillamente desearan escuchar mejor la obra de teatro.
Además, la primera fila de la zona par del patio de butacas ha sido adaptada para personas con discapacidad física con silla de ruedas; y tanto el acceso al castillo como los baños están adaptados para personas con movilidad reducida. Han sido 15 las personas que han accedido a estos servicios. Debido a la novedad del proyecto y a la situación actual de pandemia, se considera que la participación del público objetivo ha sido óptima. Los espectadores con discapacidad han acogido favorablemente los servicios de accesibilidad que se ofrecían y han colaborado con la organización dando su opinión para posibles mejoras de futuro.
El Festival ha tenido un coste de 280.000 euros de costes directos de los cuales la Diputación afronta el 95 por ciento y el Ayuntamiento de Niebla el 5 por ciento. En cuanto al impacto en empleo, 55 personas han trabajado directamente en este Festival como parte de los equipos técnicos, 31 de ellas han sido contratadas para el Festival. Respecto al impacto económico se estima que el Festival ha supuesto un impacto económico que ronda los 342.000 euros, de los cuales 38.700,00 se han quedado en Niebla, entre consumiciones, empleo generado y gasto de gasolina.