CCOO se ha concentrado este a las puertas de la Delegación de Educación de Huelva, por la defensa de un sistema educativo público de calidad.
El secretario general del Sindicato Provincial de Enseñanza de CCOO en Huelva, Carlos Sánchez Maraver, considera “totalmente insuficiente la dotación de orientadores y orientadoras, reivindicando una persona de esta categoría por centro.” Además, señala que “es un hecho evidente el insuficiente número de orientadoras y orientadores en los EOE, que hace inviable atender de manera eficaz la diversidad de líneas de actuación, con un solo día a la semana de atención a los centros educativos”.
Actualmente, Una sola persona atiende a tres centros educativos, con una media de entre 880-1000 alumnado. “No olvidemos que, mientras la UNESCO recomienda una ratio de una orientadora u orientador cada 250 alumnas y alumnos”. Ello hace que, junto con los equipos directivos, tengan que compatibilizar programas de actuación ya definidos por los organismos competentes, con las necesidades de cada centro educativo, priorizando unas actuaciones en detrimento de otras no menos importantes.
Continúa el sindicalista exigiendo “la necesidad de contratación de profesorado de PT, AL y PTIS. El personal de AL se comparte entre dos centros, pudiéndole dedicar pocas horas al alumnado que más lo requiere”. Asimismo, “hay alumnado que necesitan de supervisión especializada por parte de PTIS y tampoco reciben su atención y, en otros casos, media jornada, por estar también compartiendo con otro centro educativo, por lo que reivindicamos una bajada de ratio.”
Por ello, CCOO en sintonía con la demanda que viene realizando una parte significativa de la comunidad educativa, especialmente las familias de
alumnado más vulnerable y profesionales que les atienden, consideramos “imprescindible que la Consejería de una vez por todas, en la próxima oferta de empleo público, ofrezca suficientes plazas de este profesorado de PT, AL y de orientación educativa, para garantizar la mejor atención educativa del alumnado NEAE”.
Recordamos que la atención a la diversidad no es sólo un imperativo legal, sino una responsabilidad para las sociedades avanzadas y democráticas. En definitiva, “educar en la equidad supone pensar en una escuela para todos y todas que incluya las diferencias y reduzca las desigualdades, permitiendo que nuestras niñas y niños avancen en su crecimiento personal”.