CCOO Enseñanza de Huelva denuncia la falta de información de la Delegación de Educación y, más concretamente de la delegada, «al comunicar a los medios de comunicación el cierre del CEIP Tres Carabelas de la capital onubense sin aportar previamente a los sindicatos los datos de las circunstancias concurrentes que posibilitarían un análisis de la situación, en aras de buscar alternativas», tal y como ha afirmado el secretario general del Sindicato de CCOO de Enseñanza Huelva, Carlos Sánchez Maraver.
«El CEIP Tres Carabelas es el segundo centro público educativo, tras el IES La Ría que, en una década se cierra en la provincia de Huelva, algo que es inadmisible desde nuestra organización sindical», ha señalado Sánchez Maraver.
Sánchez ha reiterado que «se llevan años de lucha y de reivindicación para paralizar el cierre de este centro. Un centro que se ha dejado morir por las políticas educativas de la Delegación de Educación, en manos de su responsable, Estela Villalba Valdayo, y bajo el paradigma del Decreto de Escolarización de Ciudadanos, que apuesta por la enseñanza concertada y, por ende por la creación de centros elitistas».
CCOO ha participado en todas las concentraciones convocadas y ha extendido la mano tanto al centro, como a la Delegación, con el único propósito de que no se consumara, ha afirmado el secretario general de Educación, “lo que hoy es una triste realidad, el centro educativo Tres Carabelas no abrirá sus puertas el próximo curso 2022/2023″.
El único argumento que esgrime la delegada, para acometer esta decisión es el descenso de la natalidad y el bajo número de alumnado con matrícula en el mismo.
Por su parte, la responsable del área pública del sindicato provincial, Juana Soltero Hermoso, ha indicado que «ante esta circunstancia, desde la junta de personal y desde CCOO, se propuso la creación de un aula específica para atender al alumnado con necesidades educativas especiales de la zona. No obstante, nuestra sorpresa fue mayúscula, cuando la realidad fue totalmente distinta, desestimando la asignación de dicha aula en el CEIP Tres Carabelas, para concederla a un centro que está 200 m. Con ello, es claro y notorio que no se ha querido salvar a este centro educativo”.
«Si analizamos al alumnado matriculado en los dos centros concertados y cuatro centros públicos, que se sitúan en la zona de escolarización de la zona de La Orden, se observa que existe una ratio desigual entre los centros. Podemos apreciar cómo los centros concertados, en algunos cursos, sobrepasan el cupo de 25 alumnos/as por aula, mientras que en los centros públicos la ratio es muy baja. Si realmente queremos apostar por una educación de calidad, equitativa e inclusiva, que favorezca el desarrollo de metodologías activas. Así como proyectos de innovación e investigación educativa y, consecuentemente, optimice el aprendizaje integral y competencial del alumnado, se debería optar por otras medidas como bajar la ratio, dotar de recursos, potenciar la formación, etc. y no por perder un centro educativo como el que nos ocupa. Pero ha sido más fácil optar por visitas institucionales de políticos de Ciudadanos, para poco a poco dejar desfallecer al CEIP Tres Carabelas, con todo lo que ello implica», apuntan desde la central sindical.
«La delegada de Educación, ha cerrado un centro público en la provincia de Huelva, desarraigándolo de su contexto social al que presta sus servicios, sin pensar en las consecuencias que conlleva, tanto para el desplazamiento del profesorado, que de manera entusiasta realiza su labor en él, así como en la población humilde que reside en la zona y que ahora con pocos recursos, tiene que afrontar trasladarse a diario a mayor distancia y, mucho menos, el esfuerzo constante de la comunidad educativa por evitar el cierre», ha subrayado Sánchez Maraver.
El responsable sindical termina explicitando que «hemos vivido la muerte de una crónica anunciada, avivada por el Decreto de Escolarización de Ciudadanos, por la pasividad e incapacidad de la Delegación de Educación, para ofrecer una respuesta digna al respecto, anteponiendo la mejora cuantitativa por la reducción de gastos a la mejora de la calidad educativa, y esto es un hecho refutable que no podemos ni debemos permitir».
