El Ayuntamiento de Huelva acaba de incorporar tres nuevas máquinas barredoras a la flota del Servicio Municipal de Limpieza. En total, ahora se dispone de 16 vehículos para apoyar los trabajos manuales que llevan a cabo diariamente 53 operarios centrados en una de las tareas esenciales para la limpieza en la ciudad.
Como ha señalado la concejala de Hábitat Urbano e Infraestructura del Ayuntamiento de Huelva, Esther Cumbrera, “tras la reunión que mantuvimos con los representantes de PreZero, la nueva concesionaria que acaba de asumir la actividad de limpieza, tratamiento y reciclaje de residuos, se están reforzando los recursos y medios para alcanzar la excelencia en la prestación de un servicio fundamental para garantizar la calidad de vida y la buena imagen de la ciudad”.
Se trata, como exigimos a la empresa, recuerda la concejala “de alcanzar resultados sobresalientes, que hagan justicia y respondan a los esfuerzos realizados en los últimos años por el Ayuntamiento de Huelva para ampliar el contrato vigente para la prestación del servicio de limpieza en la ciudad”.
Con la nueva incorporación, la ciudad cuenta con 16 vehículos, 11 para las aceras, que ofrecen mayor versatilidad, de acceso a rincones y zonas complicadas; y 8 para calzadas, que tienen más capacidad. Se trata de máquinas de última generación, que cumplen con las más exigentes normativas respecto a la emisión de gases, resultando más ecológicas.
Además, al ser más eficaces y con más capacidad de aspiración, los operarios van provistos de sopladoras que amplían la cobertura de las máquinas y reducen los tiempos, aprovechando el resto de la jornada para profundizar en las zonas donde sea necesario. De esta forma, el barrido se realiza combinando técnicas mecánicas, manuales y mixtas, organizando los trabajos entre calzadas y aceras y siempre teniendo en cuenta que la mayor parte de los residuos se acumulan en la franja colindante a los acerados, precisamente donde suelen encontrarse vehículos aparcados, lo que complica las tareas.
Más allá de las barredoras de calzada, cepillos aspiradores y sopladoras, el refuerzo de los barrenderos es fundamental para recoger residuos acumulados en recovecos y rincones o llegar a espacios inaccesibles para las máquinas. Además, los barrenderos se encargan también del vaciado de papeleras y retirada de residuos acumulados en los alcorques de los árboles o desbordados de los contenedores.
Para organizar el barrido manual, la ciudad se divide en 53 zonas, en torno a siete cuartillos o locales, donde se guardan cada día los utensilios de cada operario y están ubicados en las calles Beas, Doctor Rubio, Avenida de Andalucía, Plaza Virgen de La Esperanza de la Orden, Parque del Torrejón, Nueva Huelva y Vistalegre.
Aunque el grueso de la actividad se realiza por las mañanas, se incorpora un refuerzo en turno de tarde para atender posibles incidencias; mientras que por la noche, los trabajos se centran en las calzadas, con máquinas barredoras, además de siete peones, que realizan un barrido manual principalmente de las zonas peatonales, con objeto de evitar la afección del servicio a las zonas más comerciales.