Autoridades locales y numerosos vecinos han guardado en la mañana de este miércoles un minuto de silencio en Almonte, Matalascañas y El Rocío en recuerdo del pequeño Alejandro, el menor de tan solo 8 años fallecido en la madrugada de este pasado martes en el incendio de su vivienda, en el número 71 de la calle Senda de los Tunos.
Una tragedia que deja a una familia destrozada. Y es que la madre del malogrado Alejandro y sus dos hermanos, una niña y un niño de 2 y 12 años, respectivamente, lograron escapar con vida de las llamas pero lo han perdido todo. «Se han quedado absolutamente sin nada, la casa está completamente vacía», subrayaba esta mañana la alcaldesa de la localidad, Rocío del Mar Castellano, al tiempo que ha puesto de manifiesto la solidaridad del pueblo almonteño, que se ha volcado organizando plataformas de recogida de ropa y enseres.
En este sentido, Castellano ha aseverado que «estamos en una situación en la que tenemos que poner todo lo que esté en nuestra mano y mucho más para que esa familia, que ya no va a poder recuperar a ese niño, pueda volver a tener una cierta normalidad», por lo que desde el Consistorio almonteño se ha puesto a su disposición tanto ayudas económicas como de servicios sociales.
Cabe recordar que el trágico suceso se produjo a las 00.45 horas de la madrugada de este pasado martes, cuando los vecinos alertaban de fuego y humo en una casa de dos plantas en cuyo interior se encontraban cuatro presonas, una madre y sus tres hijos, tres de las cuales –la madre y dos de los pequeños– lograron salir al balcón y salvar su vida. Por desgracia, el tercero de los niños no corrió la misma suerte y quedó atrapado en la vivienda, donde falleció por inhalación de humos.
Hasta el lugar se desplazaron efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos de Huelva, Policía Local, Guardia Civil y los servicios de emergencias del Servicio Andaluz de Salud, así como el concejal de Seguridad del Consistorio almonteño, Miguel Espina, y un psiclógo del Ayuntamiento para acompañar a la familia.
La intervención finalizó en torno a las 4.00 horas, momento en el que la familia fue trasladada a un centro hospitalario de la capital onubense, donde quedaron ingresados los dos menores, que han recibido el alta esta misma mañana. Uno de ellos, el mayor, presentaba quemaduras leves en los pies.