Como colofón a los actos organizados con motivo del 106 aniversario de la boda entre Zenobia y Juan Ramón Jiménez, se presentó en la casa-museo de Moguer el segundo ejemplar de la colección de Cuadernos Juanramonianos, un interesante estudio de María José Blanco sobre la faceta de conductora de Zenobia Camprubí.
El trabajo de Blanco, guía en la casa-museo desde hace años y siempre dispuesta a afrontar proyectos de investigación sobre el matrimonio Jiménez, es un relato que indaga en la Zenobia conductora en un momento en el que era noticia que una mujer tuviese el carnet de conducir.
El cuaderno, que lleva por título “Zenobia Camprubí, una atrevida conductora de su época”, ofrece interesantes datos sobre los distintos coches que tuvo la esposa del Nobel en sus 40 años de matrimonio, y nos permite descubrir a partir de sus diarios y su correspondencia personal, anécdotas y experiencias de los numerosos viajes que realizó la pareja, unos paseos que Zenobia consideraba vitales para la salud mental de su marido.
El estudio se enriquece también con los recuerdos de Zenobia sobre las salidas en coche que realizaba con sus amigas o la alegría que sentía cuando regresaba a casa después de dar clases en la Universidad de Maryland llevando en su vehículo a varias de sus alumnas.
Estas interesantes informaciones que María José Blanco ha ido recopilando durante los últimos 3 años se estructuran en una narración cercana y clarificadora sobre esta faceta de conductora de Zenobia Camprubí de la que tanto disfrutó y que tanta sensación de libertad le produjo.
En el acto de presentación, al que asistieron entre otras muchas personas el alcalde de Moguer Gustavo Cuéllar, el director de la Fundación, Antonio Ramírez o la concejala de Cultura, Eva Rodríguez, intervino junto a la autora la sobrina-nieta de Juan Ramón, Carmen Hdez. Pinzón, que recibió minutos antes el homenaje de rotular con su nombre la sala de investigación de la casa-museo donde precisamente se realizó el acto literario.