Tras una época muy convulsa a nivel sanitario y también en tantos otros sentidos, los onubenses se merecen unas vacaciones que sean reparadoras, divertidas y gratificantes a partes iguales. Algunos de los ciudadanos de Huelva optarán por viajar a otras zonas de Andalucía y del resto de España, pero muchos preferirán destinar una parte del verano a recorrer países extranjeros.
Sobre todo en este último caso lo más recomendable es viajar en avión. La ilusión se apodera de los turistas cuando van al aeropuerto. Sin embargo, lo que en un principio parecía ser el inicio de una experiencia plenamente disfrutable acaba convirtiéndose en una odisea. Y es que el vuelo ha sido cancelado.
Parece algo propio del pasado, pero lo cierto es que hoy en día siguen cancelándose muchos vuelos. Así pues, es probable que tarde o temprano tú también acabes pasando por dicha situación que tanta intranquilidad y nerviosismo ocasiona a los turistas. Y no es para menos, puesto que cuando un vuelo es cancelado hay que lidiar con varios aspectos negativos, los cuales iremos desgranando a continuación.
Adiós al plan inicial y al dinero gastado
Ponte en situación: dispones de unos días de vacaciones y lo tienes todo calculado al milímetro. Pero cuando estás en el aeropuerto, la aerolínea en la que habías depositado tu confianza comunica a todos los pasajeros que ha habido un retraso, por lo que el vuelo saldrá unas horas después.
Ya de por sí el retraso de un vuelo es una situación con la que no es fácil lidiar, aunque el problema puede ser mayor si cabe: tras intentar hacer una reparación del avión, la compañía desiste y finalmente anuncia que se cancela el vuelo en cuestión.
No siempre el motivo guarda relación con un problema técnico de la aeronave, ya que la lista de contratiempos que pueden dar pie a una cancelación del vuelo es muy extensa.
En cualquier caso, es muy desagradable la situación que se produce. En primer lugar, aquel plan que inicialmente tenías en mente queda descartado por completo. Y es que no llegarás al destino a la hora indicada, lo cual puede traducirse en varios contratiempos. Uno de ellos se resume en la imposibilidad de acceder al hotel.
Hay que tener en cuenta que, si bien es cierto que muchos hoteles cuentan con check-in 24 horas, algunos de ellos solo admiten a nuevos huéspedes si los mismos acuden a las instalaciones en un horario en concreto. Si el vuelo es retrasado, tal vez no llegues a tiempo. Pero, ¿y si se cancela? La situación es todavía peor, puesto que no podrás cancelar la reserva del hotel y habrás pagado por un servicio del que no podrás disfrutar.
Precisamente la pérdida de dinero es una de las situaciones que más temen quienes han de hacer frente a la cancelación de un vuelo. No solo nos referimos al importe pagado para alojarse en un hotel, sino también al de las actividades que han sido reservadas.
Por suerte, algunos de los planes que ya se habían reservado tal vez puedan anularse a última hora, obteniendo así una devolución íntegra del dinero previamente pagado, pero no suele ser habitual.
Desafortunadamente estos no son los únicos contratiempos con los que deben lidiar los viajeros cuyo vuelo es cancelado. Por si todo ello fuera poco, el estrés se apodera de los turistas. Las vacaciones están pensadas precisamente para despedirse de este estado de nerviosismo que tan habitual es entre los trabajadores y los estudiantes. Por desgracia, el período vacacional empieza de la peor manera posible, así que el disfrute y la desconexión quedan relegados a un segundo plano.
La importancia de reclamar el vuelo cancelado
Aunque muchos turistas son comprensivos con las adversidades que pueden surgirle a una compañía aérea, es inevitable que la indignación les invada. Independientemente de cuál sea tu sentimiento hacia la empresa en la que habías confiado y que ahora te ha fallado cancelando tu vuelo, es esencial que tomes las medidas oportunas.
En concreto nos referimos a reclamar vuelo cancelado, pudiendo optar para ello por dos vías distintas. La primera consiste en hacer tú mismo una reclamación. En muchos casos ni siquiera obtendrás respuesta alguna por parte de la aerolínea. Además, el papeleo con el que tendrás que tratar será incesante, así que incluso tal vez desistas antes de obtener ningún tipo de compensación.
Todo cambia en caso de decantarte por la segunda vía. Hablamos de aquella que consiste en depositar la confianza en una empresa como Reclamación de Vuelos. Se trata de la mejor opción actual para reclamar un vuelo cancelado.
En menos tiempo del esperado acabas obteniendo una indemnización, por lo que uno de los principales problemas que surgen al sufrir una cancelación de un vuelo -la pérdida del dinero- es compensada no solo devolviéndote el importe del billete, sino también reclamando como mínimo 250 euros, cifrándose el máximo en 600 euros de indemnización además de los gastos particulares que te haya ocasionado la incidencia.