El Ayuntamiento de Huelva y la Asociación Huelva Naturaleza y Aves (AHUNA) han llevado a cabo este sábado tareas de señalización con el objetivo de proteger y conservar a las aves costeras nidificantes en la playa de El Espigón. Para ello, han contado con la colaboración de los usuarios y usuarias de Aspapronias, que han realizado los materiales necesarios de señalización para identificar las zonas de cría.
El teniente alcalde de Urbanismo, Medio Ambiente y Transición Ecológica, Manuel Gómez Márquez, ha señalado que se trata de una “labor fundamental para garantizar la preservación de dos especies en peligro – el chorlitejo patinegro y el charrancito común-, pues, debido a que anidan en la arena, aunque en zona seca donde no llega la marea, es posible romper su periodo de cría”. Gómez Márquez ha resaltado que El Espigón es un entorno natural, reserva de la Biosfera, y “tenemos que proteger y poner en valor su riqueza natural, haciéndola compatible con un uso adecuado y respetuoso del espacio”.
Por otra parte, el teniente alcalde ha destacado la participación de los usuarios y usuarias de Aspapronias, “fomentando la inclusión de estas personas en una labor tan bonita y necesaria”.
De este modo, a lo largo de aproximadamente dos horas, unas 30 personas han participado en las tareas de señalización y perimetración de los lugares de cría, concretamente, al Oeste de la pasarela 1, donde se encuentra una mayor colonia, y al Este de la pasarela 6. Además, se mantendrán una vigilancia y control durante el periodo de cría de las especies, que va principalmente de mayo a agosto.
Con estas medidas se pretende que tanto personas usuarias de la playa como trabajadores y trabajadoras de los diferentes servicios de El Espigón sean conscientes del lugar de cría de estas dos especies de aves para extremar el cuidado en el desarrollo de sus actividades.
Por su parte, el secretario de AHUNA, José Antonio Sánchez, ha agradecido al Ayuntamiento su “sensibilidad y apuesta por conservar la riqueza natural de este entorno” y ha apuntado que “proteger estas aves en peligro no está reñido con disfrutar de la playa”.
