14 diciembre 2024
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Diferencias entre una bomba de calor y equipos de calefacción

Cuando bajan las temperaturas y hay que calentar la casa es cuando somos conscientes de las características de nuestros equipos de calefacción: si son más o menos eficientes, si rinden lo suficiente para conseguir un ambiente confortable, el precio de la energía que nos supone cada mes… Por ello, es importante reflexionar sobre cuál es el mejor sistema de calefacción dependiendo de las condiciones de cada vivienda y de las necesidades de quienes allí habitan.

De un tiempo a esta parte, las bombas de calor se están popularizando como una buena solución de calefacción para los meses más fríos en contraposición a las calderas de gas con radiadores tradicionales. Durante muchos años la calefacción de gas ha sido la más instalada seguida de la eléctrica. Sin embargo, hoy en día existen otras alternativas que utilizan energías renovables y limpias como la aerotermia, que se relaciona con la energía térmica que contiene el aire. Con este tipo de energía es con el que trabajan las bombas de calor para calentar las viviendas.

Con toda esta información, ¿cuáles son las diferencias entre las bombas de calor y otros equipos de calefacción? Descubre los puntos esenciales a continuación.

Equipos de calefacción tradicionales

Los equipos de calefacción tienen como objetivo generar calor y elevar la temperatura de un espacio interior como un salón o una habitación. Para ello, existen diferentes opciones en las que el calor se crea mediante distintos procesos.

Algunos de los tipos de calefacciones más comunes son las calefacciones de gas -que según algunos estudios llegan a ser más del 30% de todos los hogares españoles-, el suelo radiante y la calefacción eléctrica, dentro de la que se pueden incluir los acumuladores, las estufas, los calefactores… Cada una de ellas utiliza un tipo de suministro (gas, electricidad, etc.) para generar el calor y distribuirlo por todas las estancias de la vivienda.

Como ya hemos comentado, con la creciente demanda de energías menos contaminantes, han surgido nuevos sistemas de calefacción como las calderas de biomasa, la geotermia o la aerotermia. La principal diferencia entre todas ellas, tanto las calefacciones clásicas como las más actuales, es la energía que utilizan y la eficiencia energética que tienen.

¿Qué son las bombas de calor?

Las bombas de calor son un sistema de calefacción no contaminante, económico y práctico, perfecto para quienes quieran un equipo sostenible para su hogar. Este tipo de sistema obtiene calor del ambiente sin que haya ningún tipo de combustión ni la intervención de combustibles fósiles.

El proceso de generación de calor funciona absorbiendo el calor del ambiente y convirtiéndolo en vapor. A través de la aerotermia, la bomba calienta el aire y se transfiere al espacio que se quiere climatizar a una temperatura alta.

Las bombas de calor pueden tener varias funciones como la que estamos comentando de calefacción, como aire acondicionado y también para la producción de ACS, agua caliente sanitaria. Todo ello dependiendo de si el calor del aire exterior se transfiere al espacio o al agua.

Consejos para elegir bomba de calor u otros sistemas de calefacción

  • Es muy importante analizar el espacio a calentar y sus características: el aislamiento del edificio, el cerramiento de la vivienda, la colocación de los aparatos, la normativa de la comunidad…
  • Para un buen rendimiento de una bomba de calor, es conveniente poca oscilación térmica, es decir, que la temperatura de la fuente inferior sea la más alta posible y la de la fuente superior la más baja posible. Para lograr una temperatura alta en entornos bajo cero, las bombas de calor no son la alternativa más eficiente ni económica.
  • En espacios pequeños y de temperaturas suaves, sin embargo, las bombas de calor son el sistema de calefacción más eficiente que cuenta con una buena tecnología.
  • Hay que tener en cuenta que instalar una bomba de calor solo lo puede realizar el personal certificado para ello. Es importante tener en cuenta las normativas de cada región y de la propia comunidad de vecinos.

Con toda esta información será mucho más fácil elegir un sistema de calefacción u otro, teniendo en cuenta múltiples factores y evitando posibles sorpresas futuras.

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