Cepsa compensará alrededor de 55.000 toneladas de CO2 del gasóleo para calefacción que sus clientes residenciales consuman este invierno, el equivalente a la plantación de 330.000 árboles. Esta iniciativa, impulsada por el negocio de Ventas Directas de la compañía, es pionera entre las empresas del sector en España y consistirá en la financiación de diferentes proyectos de reforestación y preservación de la masa forestal que permitan retirar CO2 de la atmósfera.
La compañía colaborará en iniciativas medioambientales, las cuales se desarrollarán en su mayor parte en España, mientras que el resto se harán en otros países en los que Cepsa tiene presencia. En concreto, varios de estos proyectos se llevarán a cabo en zonas afectadas por incendios forestales, como Vilardevos, en la provincia de Ourense, y Hoyo de Pinares, en Ávila.
En esta campaña están incluidos todos los productos de gasóleo para calefacción y será Cepsa quien asuma la compensación, sin repercutir ningún coste a sus clientes. Estos contarán con la garantía de que los certificados de compensación de CO2 estarán avalados por una entidad externa, además de poder seguir de forma individualizada cada uno de los proyectos a través de esta web, e incluso tendrán la posibilidad de visitarlos.
“El objetivo de Cepsa es generar un impacto positivo en nuestro entorno. Por ello, trabajamos cada día para facilitar la descarbonización de las necesidades energéticas de nuestros clientes. Mediante esta acción, lograremos reducir la huella de carbono de nuestros productos energéticos para la calefacción, mientras seguimos avanzando en la producción de moléculas verdes a gran escala”, subraya Carlos Barrasa, director de Commercial & Clean Energies de Cepsa.
Un compromiso firme con la reducción de emisiones
Esta iniciativa se enmarca en la estrategia 2030 de la compañía, Positive Motion, con la que quiere ir más allá de las cero emisiones netas (net zero) e ir más allá, permitiendo a los clientes y a la sociedad avanzar en la dirección correcta (Net Positive). La compañía ha establecido una ambiciosa hoja de ruta para recortar sus emisiones, situándose entre las compañías referentes de su sector. En concreto, en 2030, reducirá sus emisiones de CO2 (alcance 1 y 2) en un 55% respecto a 2019, y aspira a alcanzar cero emisiones netas en 2050. En cuanto al índice de la intensidad de carbono de sus productos (alcances 1, 2, y 3), el objetivo de la compañía es reducirlo entre un 15 y un 20% en 2030.
Recientemente, la compañía ha firmado la extensión del vencimiento de su línea de crédito sindicada de 2000 millones de euros hasta septiembre de 2027 con 18 entidades financieras y, por primera vez, ha acordado que sus condiciones económicas se vinculen al cumplimiento de indicadores medioambientales y sociales. Esta operación pone de manifiesto el continuo apoyo que Cepsa ha recibido de la comunidad financiera, así como a la estrategia Positive Motion de la compañía y a su compromiso con la transición energética.