Las empresas juegan un papel sumamente importante en lo que concierne a la búsqueda de soluciones sostenibles. Y es que, la sostenibilidad empresarial no solo es una elección moral, sino también una estrategia sumamente efectiva para el éxito a largo plazo, ya que, cada vez más, los consumidores valoran, positivamente, a las empresas que toman un rol activo para la construcción de un mundo mucho más sostenible.
¿Lo mejor? En muchas ocasiones es suficiente con hacer algunos pequeños cambios para lograr un gran impacto. De allí la recomendación de contar con la ayuda y asesoría de empresas especializadas que pueden guiar, de una forma mucho más eficiente, en ese camino hacia la sostenibilidad. En este sentido, TravelPerk presenta estas ideas sostenibles corporativas sumamente fáciles de implementar y que, como comentamos anteriormente, generan un gran impacto positivo para el cuidado del medio ambiente.
A continuación, compartimos contigo algunas de las estrategias más efectivas para tener una empresa con conciencia ambiental:
1. Aprovechamiento de las últimas tecnologías para reducir el uso de papel
Hoy en día contamos con herramientas que nos permiten gestionar muchos aspectos de forma ciento por ciento digital y con ello reducir el uso del papel. En la actualidad podemos gestionar la firma de documentos importantes haciendo uso de firmas digitales que, en la práctica, son tan seguras como las firmas físicas. La nueva era digital también facilita la colaboración y la gestión de archivos. Y es que, el uso de plataformas en la nube para almacenar y compartir documentos reduce la necesidad de impresiones y contribuye a una oficina más ecológica y eficiente.
2. Optimización de sistemas de climatización
El control de la climatización inteligente es esencial para la eficiencia energética. En este sentido, la programación precisa de los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado según las necesidades del espacio no solo reduce el consumo de energía, sino que también mejora la comodidad de los empleados.
3. Instalación de papeleras de reciclaje
Acciones pequeñas pueden tener un gran impacto. Es por ello que, la disposición de papeleras de reciclaje en toda la oficina, especialmente en lugares claves, es recomendable para promover la separación responsable de los desechos. Esto no solo reduce la cantidad de basura enviada al vertedero, sino que también fomenta una cultura de trabajo más consciente.
4. Sustitución de bombillas tradicionales por las de bajo consumo
La iluminación efectiva es fundamental. El uso de bombillas de bajo consumo (LED) en lugar de bombillas tradicionales no solo reduce el consumo de energía, sino que también reduce los costos a largo plazo. Este pequeño cambio no solo es ecológico, sino que también contribuye a reducir los gastos de la empresa.
5. Reducir la frecuencia de viajes comerciales
Gracias a los avances de las nuevas tecnologías, hoy en día podemos tener reuniones importantes de forma remota, tan solo necesitamos una buena conexión. Teniendo en consideración estas facilidades, aprovechar al máximo la colaboración en línea y las herramientas de videoconferencia ayudan a reducir la huella de carbono de los viajes de negocios. El impacto ambiental se reduce al planificar desplazamientos para situaciones esenciales.
6. Implementar prácticas de compras sostenibles
Es crucial elegir proveedores que compartan nuestros valores de sostenibilidad. El uso de certificaciones ambientales y prácticas éticas en los bienes y servicios ayuda a crear una cadena de suministro más sostenible y demuestra el compromiso de la empresa con la responsabilidad social.
7. Fomentar el uso de transporte sostenible
Si los viajes son inevitables para los empleados, incentivar el uso de transporte público, bicicletas o vehículos eléctricos puede tener un impacto significativo. La implementación de programas de reembolso para los empleados que opten por medios de transporte más ecológicos puede ser una estrategia sumamente efectiva y atractiva.
Estos son algunos ejemplos de cómo, con unos pequeños cambios, podemos generar un gran impacto en nuestras políticas de sostenibilidad. Se trata de un compromiso que beneficia, tanto al entorno, como a la propia empresa, ya que le permitirá reducir costos y ganarse, más fácilmente, la preferencia de los consumidores.