José María Arenzana ha tenido la delicadeza de donarnos un diccionario para generar nuevas ‘voces’ de palabras huecas de tanta usarlas. Y en juegos de raíces y desinencias alborota palabras para que broten otras nuevas. Algunas onomatopéyicas como ‘zigzag’, otras grandes para indicar algo grande como ‘elefante’, otras te llevan la mente a esa acción como ‘brotar’ y más aún ‘rebrotar’.
Este periodista de Huévar del Aljarafe (Sevilla) afincado en la capital hispalense, está recorriendo Andalucía para dar a conocer su Ficcionario, lleno de definiciones de ficción, que no de broma, aunque defina a ‘broma’ como el nombre de la capital de un imperio cuya actividad más popular y divertida se desarrollaba en el circo ; y ‘bromear’ como partirte de la risa mientras miccionas. Este libro no admite la censura, palabra a la que atribuye el interrumpir cien veces la lectura del Corán por orden gubernativa.
Ya ha realizado presentaciones Sevilla (una de ellas presentado por Juan y Medio), en su pueblo natal y en Jerez. Ahora viene a Huelva de la mano de Angustias Hernández Suárez, mujer muy activa e implicada en el mundo cofrade onubense y tertuliana habitual en diversos medios locales de radio y TV.
Arenzana como reportero asistió a los conflictos bélicos de Sudán, Eritrea y Ruanda, y ha publicado numerosos trabajos sobre más de 40 países en diarios y revistas nacionales e internacionales.
En la presentación, que tendrá lugar este viernes, 16 de febrero, a las 19.00 horas, en la sala Zenobia Camprubí de la Fundación Cajasol (calle puerto, 10) también se podrá adquirir su libro ‘Ruanda, cien días de fuego’, donde explica en tan solo 100 páginas, cómo fue aquel verano de 1994 con casi un millón de muertos a machetazos.