«Aqualia volvió a asumir la gestión del servicio de agua en Matalascañas, El Rocío y Matalagrana, tras un cambio en la administración del agua en agosto de 2023. Tanto desde el Ayuntamiento de Almonte como desde la propia empresa se aseguró a los treinta trabajadores que los términos y derechos previamente establecidos por Giahsa serían respetados», denuncia la sección sindical de CSIF.
«Sin embargo, –continúa el sindicato–, tras ocho meses desde su reintegración, los trabajadores afectados denuncian que Aqualia no ha cumplido con el compromiso de respetar los derechos adquiridos durante la gestión anterior, a cargo de Giahsa. A pesar de los intentos de negociación, que se han extendido desde el inicio de su gestión, la empresa no ha mostrado disposición a mantener los acuerdos previos».
«Estamos simplemente reclamando que se nos respeten los derechos que teníamos con la anterior empresa, nada más», afirma la delegada de CSIF del centro María José García Ramos.
Desde el sindicato aseguran que «a lo largo de estos meses, los empleados han intentado en varias ocasiones establecer un diálogo con las autoridades municipales de Almonte para abordar esta situación. Sin embargo, sus solicitudes de reunión con el alcalde, presentadas a través de la sede electrónica del Ayuntamiento, han sido ignoradas sistemáticamente. Fechadas el 24 de enero, 18 de febrero y 28 de febrero, estas peticiones no han recibido respuesta alguna por parte de las autoridades municipales».
Así, «ante la falta de respuesta por parte de las autoridades y la persistente negativa de la empresa a cumplir con los acuerdos previos, los trabajadores han decidido tomar medidas». Por ello, la sección sindical de CSIF anuncia un calendario de movilizaciones que incluye concentraciones en la puerta del Ayuntamiento de Almonte para los días 19 y 22 de marzo, de 18:00 a 21:00 horas. Además, los trabajadores planean mantener estas protestas en el mes de abril si no se soluciona. «Si no llegamos a un acuerdo satisfactorio, no descartamos iniciar una huelga el 2 de mayo», advierte la delegada. «Mis compañeros ya están hartos. Muy hartos», concluye.
REACCIONES
AQUALIA
La empresa Aqualia, por su parte, ha desmentido tajantemente a través de un comunicado de prensa que los términos y derechos previamente establecidos por Giahsa a esta treintena de trabajadores no hayan sido respetados. Y es que, asevera la empresa, «no solo les ha mantenido todas las condiciones laborales que tenían (salarios, mejoras sociales, horarios, etc.), sino que, además, ha realizado mejoras en las mismas, como reconocimiento de categorías laborales que previamente no se habían hecho, así como subida de categoría a 14 de los 30 trabajadores».
En este sentido, la empresa quiere destacar que incluso ha asumido ayudas sociales que correspondía a Giahsa haber abonado por el periodo en que ésta fue la que prestó el servicio. Por ejemplo, ayudas a estudios, prótesis dentales, gafas, nacimientos, etc. «Nuestros trabajadores en Matalascañas, El Rocío y Matalagrana mantienen las mismas condiciones laborales que tenían durante su periodo de trabajo en Giahsa», reiteran.
Por tanto, Aqualia quiere aclarar que «cualquier derecho adicional que se pretenda adquirir por parte del sindicato CSIF no consta en el convenio de Giahsa con el que han sido traspasados, ni existe acreditación alguna de que disfrutasen del mismo durante su época en Giahsa», al tiempo que subraya que ha mantenido «diversas reuniones con representantes sindicales, fruto de las cuales se han alcanzado acuerdos favorables para los trabajadores».
No obstante, finalizan, ante las 11 demandas interpuestas por los trabajadores a la empresa, ésta ha cesado dichos encuentros a expensas de que se celebren los correspondientes juicios.