Autor: Vinícius Alonso
21/08/2024
Quien conoce sabe que la educación musical es un gran diferencial en el desarrollo cognitivo de los niños. Por esta razón, la educación musical ha sido ampliamente estudiada por especialistas en neurociencia y educación, revelándose como una herramienta poderosa en este ámbito.
Diversos estudios muestran que el aprendizaje de música desde la infancia no solo mejora habilidades específicas, sino que también tiene un impacto positivo en áreas del cerebro asociadas con el lenguaje, la memoria, la atención y la capacidad de resolver problemas.
La música es una forma de arte que involucra la integración de diversas funciones cerebrales. Cuando un niño aprende a tocar un instrumento o participa en actividades musicales, diferentes áreas del cerebro se activan simultáneamente. Para profundizar en este tema, conversamos con la renombrada pianista y educadora musical Ekaterina Sotnikova.
Para Ekaterina, quien comenzó su carrera musical a los cuatro años y acumula más de 20 años de experiencia en el área, la música va más allá de ser una forma de arte; desempeña un papel fundamental en el desarrollo del cerebro infantil.
Según Ekaterina, la exposición temprana a la música puede moldear áreas del cerebro responsables de funciones como la memoria, la atención y el lenguaje. «Los estudios indican que los niños que aprenden a tocar un instrumento musical presentan una mayor conectividad neural, especialmente en las regiones del cerebro asociadas con el procesamiento auditivo, la coordinación motora y las habilidades espaciales», añade la pianista.
«Los niños que estudian música demuestran una mayor facilidad para resolver problemas complejos, además de tener un mejor desempeño en materias como matemáticas y ciencias. La práctica musical requiere la interpretación simultánea de notas, ritmos y melodías, lo que estimula la capacidad de multitarea y mejora la memoria de trabajo», completa Ekaterina, quien ha tenido el honor de presentarse en más de 100 conciertos y competiciones en diversas ciudades y países.
Un estudio de la Universidad de Kansas reveló que los estudiantes de primaria involucrados en programas de música tenían notas más altas en matemáticas y lectura que aquellos sin educación musical. Los niños que aprendieron música mostraron una mejora del 20% en sus habilidades matemáticas.
Pensando en estos aspectos, también podemos mencionar que la música tiene el poder de mejorar la habilidad de lectura y comprensión de textos. De acuerdo con Ekaterina, los niños que se involucran regularmente con la música tienden a desarrollar una mayor sensibilidad fonológica, lo cual puede contribuir a la alfabetización y al aprendizaje de nuevos idiomas.
Según otro estudio, realizado en Alemania, los investigadores siguieron a niños que comenzaron a aprender música a los cinco años. En este estudio descubrieron que, a los siete años, estos niños tenían un coeficiente intelectual en promedio 7,5 puntos más alto que los que no tuvieron educación musical.
Estimulación de la creatividad y expresión
La música es una de las formas más puras de expresión creativa. Hablando sobre este tema con la especialista, cuando un niño aprende a tocar un instrumento o componer una música, en realidad está participando en procesos de pensamiento creativo.
“Incluso al interpretar piezas musicales ya existentes, los niños son animados a interpretar la música a su manera, aportando su propio estilo y emoción a la interpretación. Esta personalización de la expresión musical ayuda en la construcción de la identidad y en el autoconocimiento”, añade Ekaterina.
La pianista Ekaterina Sotnikova concluyó sus estudios en el renombrado Conservatorio Estatal de Saratov, donde mantuvo una nota ‘A’ a lo largo de un exigente currículo. Durante su formación, participó en conciertos y competiciones bimensuales, perfeccionando sus habilidades de interpretación y ganando amplia visibilidad.
A lo largo de estos años, Ekaterina aprovechó todas las oportunidades para participar en eventos y presentaciones, lo que enriqueció significativamente su experiencia y habilidades. «Mi pasión por la música se refleja no solo en mis actuaciones, sino también en mi compromiso de cultivar la próxima generación de músicos», comparte Ekaterina.
Como profesora de música y acompañante, su principal objetivo es inspirar a sus alumnos a alcanzar la excelencia y desarrollar un profundo amor por la música. Además, su extenso currículum incluye trabajo voluntario, en el cual ha utilizado sus talentos musicales para enriquecer eventos comunitarios y apoyar causas benéficas. Por ejemplo, ha realizado conciertos benéficos para ancianos, brindándoles una experiencia más enriquecedora a través de la música.
Sobre la educación musical en conceptos como creatividad y expresión, Ekaterina dice que la música sirve como un lenguaje universal que trasciende barreras culturales y lingüísticas. “Para los niños, especialmente, la música ofrece un canal para expresar emociones que quizás no puedan verbalizar. Esto puede ser particularmente beneficioso para los niños que enfrentan dificultades emocionales o sociales”, agrega.
Sobre el tema, un estudio de la Universidad de California afirma que los niños que participan en programas de música presentan una mayor actividad en las áreas del cerebro asociadas con la creatividad y el pensamiento abstracto, con indicios de que estos niños tienen una mayor facilidad para crear nuevas conexiones entre conceptos aparentemente no relacionados.
Finalmente, podemos decir que la educación musical no solo desarrolla habilidades técnicas y cognitivas, sino que también juega un papel fundamental en la estimulación de la creatividad y en la expresión personal de los niños.
Es a través de la música que ellos encuentran un espacio para explorar sus emociones, expresar su individualidad y desarrollar pensamientos creativos. “En mi opinión, con tantos beneficios comprobados, la educación musical debería ser una prioridad en las escuelas y comunidades, asegurando que todos los niños tengan la oportunidad de explorar y desarrollar su potencial a través de la música”, concluye Ekaterina.