La búsqueda de soluciones sostenibles ha sido una prioridad en diversos sectores del mercado, y los aeropuertos no son una excepción. Con las crecientes preocupaciones ambientales y la necesidad de reducir costos operativos, implementar energía solar en los aeropuertos se ha convertido en una opción cada vez más atractiva.
En los Estados Unidos, varios aeropuertos ya han instalado sistemas solares para alimentar sus operaciones. En 2023, aeropuertos como el Aeropuerto Internacional de Denver en Colorado y el Aeropuerto Internacional de Indianápolis en Indiana se destacaron por su capacidad solar instalada, contribuyendo significativamente a reducir su huella de carbono.
Al considerar este tema, podemos explorar numerosos beneficios, pero también algunos obstáculos en la adopción de la energía solar en aeropuertos. Para entender mejor el asunto, hablamos con Judith Ramírez, Ingeniera Eléctrica con posgrado en Gestión de Marketing y Ventas. Para ella, adoptar energía solar en los aeropuertos no es solo una tendencia, sino una necesidad estratégica para reducir costos operativos y cumplir con los objetivos de sostenibilidad global.
«La energía solar ofrece a los aeropuertos una oportunidad única para volverse más autosuficientes en términos energéticos, asegurando la continuidad operativa incluso en situaciones de inestabilidad en la red eléctric”, añade la especialista. Entre los beneficios, Judith también menciona otros aspectos, como la reducción de costos operativos.
En este sentido, la profesional afirma que la energía solar permite ahorrar significativamente en las facturas de electricidad de los aeropuertos, ya que la instalación de paneles solares puede reducir sustancialmente los costos energéticos, impactando positivamente los presupuestos a largo plazo.
La sostenibilidad ambiental también es un tema clave cuando se trata de instalar energía solar en aeropuertos. La energía solar es una fuente renovable y limpia, contribuyendo a la reducción de la huella de carbono de los aeropuertos. Adoptar esta tecnología se alinea con los objetivos de sostenibilidad global y ayuda a los aeropuertos a cumplir con regulaciones ambientales cada vez más estrictas.
«Aunque la inversión inicial en sistemas solares puede ser significativa, el retorno a largo plazo, tanto en ahorros financieros como en beneficios ambientales, es innegable”, añade Judith. Según estudios, en muchos casos, los aeropuertos que han adoptado esta tecnología han logrado reducir sus facturas de energía entre un 20 y un 30%, estabilizando los costos a largo plazo, incluso con fluctuaciones en los precios de la energía.
Al adoptar energía solar, los aeropuertos también demuestran un compromiso con la sostenibilidad, lo que puede mejorar su imagen ante el público e incluso ante socios comerciales. «La elección de invertir en energía solar también refleja un compromiso con la responsabilidad ambiental, algo que cada vez más pasajeros y aerolíneas valoran al elegir un aeropuerto”, señala la especialista.
Desafíos de Implementar Energía Solar en Aeropuertos
Como se mencionó anteriormente, los beneficios de la energía solar en los aeropuertos son numerosos. Sin embargo, al igual que en todos los mercados, también existen desafíos que enfrentar. Comencemos con la inversión.
Según Judith, instalar sistemas solares en aeropuertos requiere una inversión inicial significativa, lo que puede ser un obstáculo para muchos administradores. Aunque los costos se recuperan con el tiempo, la necesidad de capital inmediato puede complicar la implementación, especialmente en aeropuertos más pequeños o en regiones con presupuestos limitados.
En cuanto a los desafíos del sector, Judith menciona la complejidad técnica y logística, ya que la instalación de paneles solares en los aeropuertos presenta retos técnicos, como adaptar la infraestructura existente, garantizar la seguridad de las operaciones aéreas y maximizar la eficiencia del sistema solar.
Según estudios, es esencial asegurar que los paneles solares no creen reflejos que puedan afectar la visibilidad de los pilotos y controladores de tráfico aéreo. Para mitigar estos riesgos, la Administración Federal de Aviación (FAA) en EE. UU. ha desarrollado directrices específicas que requieren una evaluación visual antes de la instalación de paneles para garantizar que no haya riesgo de deslumbramiento.
Otro aspecto que debe evaluarse es el impacto climático y geográfico en un aeropuerto. La eficiencia de los sistemas solares depende de factores climáticos y geográficos. Al respecto, Judith añade: «Cada aeropuerto tiene sus particularidades, pero con una planificación adecuada, es posible adaptar la infraestructura existente para maximizar los beneficios de la energía solar, incluso en regiones con menor incidencia solar.»
La experiencia y eficiencia de Judith se demuestran en su trabajo en proyectos de alto impacto. Un ejemplo notable es el proyecto de eficiencia energética en el Aeropuerto El Dorado, donde lideró una iniciativa que generó 3.3 gigavatios por año, equivalente a una reducción de 510 toneladas de CO2 en la huella de carbono. Este proyecto resalta su capacidad para implementar soluciones efectivas que no solo ahorran energía, sino que también promueven la sostenibilidad ambiental.
En conclusión, Judith afirma que implementar energía solar en aeropuertos representa una iniciativa estratégica que combina sostenibilidad y eficiencia operativa, y a pesar de los desafíos, los beneficios a largo plazo hacen que esta transición sea una opción atractiva. «A medida que la tecnología avanza y los costos disminuyen, es probable que más aeropuertos alrededor del mundo adopten energía solar como una solución viable para sus desafíos energéticos”, concluye la especialista.
Conoce más sobre las experiencias de Judith Ramírez
El principal objetivo profesional de Judith es mejorar la competitividad de las empresas a través de la optimización de costos energéticos y la mejora de sus índices de sostenibilidad. Con más de 14 años de experiencia en el sector energético, incluidos ocho años dedicados al mercado de energías renovables, Judith es una líder reconocida en la industria.
Su impacto en el sector va más allá de la experiencia técnica. Judith tiene una amplia experiencia en evaluación de viabilidad, análisis financiero, planificación estratégica, ventas, desarrollo empresarial y gestión de clientes. Su carrera incluye roles de liderazgo en empresas nacionales y multinacionales, siempre centradas en energías renovables.
«Mi experiencia abarca tanto el mercado de energía renovable como proyectos eléctricos industriales a gran escala. He liderado el cierre de contratos por más de 50,000 kWp en energía solar para generación distribuida en Colombia. Estos resultados se lograron a través de la implementación de proyectos renovables en más de 35 empresas, con inversiones que superan los 45 millones de dólares en los últimos siete años’, destaca Judith.
Judith enfatiza que estos proyectos producen energía que es al menos un 20% más competitiva en comparación con la energía suministrada por la red, aumentando significativamente la competitividad de sus clientes. Además, estos proyectos evitan la emisión de más de 7,100 toneladas de CO2 al año, contribuyendo a la neutralización de la huella de carbono de las industrias involucradas y promoviendo un futuro más sostenible. Clientes notables que se benefician de sus soluciones incluyen empresas como Acerías Paz del Río (9,900 kWp), CENIT (22,450 kWp), Aeropuerto El Dorado – OPAIN (2,801 kWp), Alpina (2,517 kWp) y Edificios Terranum (2,761 kWp).