La Guardia Civil ha investigado a un menor de edad por un supuesto delito de hurto de móvil y a otra persona, mayor de edad, por un presunto delito de receptación, después de que al inicio del curso pasado se interpusieran varias denuncias por la sustracción de teléfonos móviles en un centro escolar de Palos de la Frontera que «generaron preocupación entre padres, alumnos y docentes».
Según ha indicado el Instituto Armado en una nota de prensa, la Guardia Civil inició las investigaciones que se alargaron durante varios meses e identificaron al supuesto autor, tratándose de un alumno que en horario lectivo aprovechaba los descuidos de sus compañeros para sustraerle el terminal móvil.
Además, las investigaciones continuaron con la identificación e investigación de otra persona, mayor de edad, por un presunto delito de receptación, ya que compró uno de los móviles supuestamente robados.
Ante este hecho, la Guardia Civil recomienda que cuando realicen una compra de un artículo de segunda mano a un particular, debe comprobarse su origen y, si es posible, pedir comprobantes de compra o documentación que demuestre que el producto no es robado. Si algo parece demasiado barato o sospechoso, puede ser una señal de que esté relacionado con actividades ilegales y en caso de duda, abstenerse de realizar la compra.