El actor brasileño Ricardo Teodoro ha presentado este lunes la película ‘Baby’ (Brasil, 2024), una coproducción entre Brasil, Francia y Países Bajos dirigida por Marcelo Caetano, con la que competirá por el Colón de Oro en la Sección Oficial de Largometrajes del Festival de Huelva.
Esta obra audiovisual del experimentado director viene a contarnos la realidad de los días y las noches brasileñas en las calles de la ciudad de Sao Paulo, a través de una mezcla de amor, prostitución masculina, amistad y mucha vida callejera.
La película cuenta con un elenco encabezado por João Pedro Mariano, Ricardo Teodoro, Ana Flavia Cavalcanti y Bruna Linzmeyer. Un largometraje que narra la historia de Wellington, un joven que, tras salir de un centro de menores, se enfrenta a la soledad y la crudeza de las calles brasileñas.
‘Baby’ ha sido presentada en la Semana de la Crítica de Cannes y es la reciente ganadora del Premio Abrazo del Festival de Biarritz y del Premio Sebastiane Latino en el Festival de San Sebastián, certamen en el que el actor Ricardo Teodoro se hizo con el Premio al Mejor Actor Revelación.
Ricardo Teodoro ha calificado la película como “tierna, vitalista y dura”, en la que se refleja “una historia de un chaval que sale de la cárcel, él está solo, la familia lo ha abandonado y encuentra en otro hombre la posibilidad de poder vivir en el centro de Sao Palo, con las felicidades y con las tristezas propias, pero descubriendo que es posible sobrevivir y tener una familia, tener ternura y relaciones personales”.
El actor ha asegurado que ‘Baby’ “nos invita a reflexionar sobre los derechos LGTBI en Brasil, con una mirada muy tierna sobre ese mundo”. Así, ha detallado que São Paulo tiene un colectivo LGTBI “muy grande”, que en ‘Baby’ se enfoca “con una mirada llena de amor”.
Teodoro ha destacado también “la segunda etapa de gloria” que está viviendo actualmente el cine brasileño, con una fuerte presencia en muchos festivales internacionales, en una época en la que había “un gobierno anticultura”. “Cuando el arte se ve más presionado, más fluye por otros lados, como ha ocurrido en Brasil”, ha explicado.