La alcaldesa de Huelva, Pilar Miranda, acompañada de los concejales de Infraestructuras y Servicios Públicos, Mariló Ponce y Participación Ciudadana, Manuel Jesús Soriano, han visitado este martes la barriada de La Orden para supervisar las actuaciones de reforma que se están llevando a cabo en la Plaza Cristo del Perdón, “con el principal objetivo de mejorar las condiciones de accesibilidad de este espacio emblemático y con mucha vida para los vecinos”.
La actuación incluye la creación de un nuevo acceso peatonal, rehabilitación de rampas, rebajes y acerado, reubicación de mobiliario urbano, reforma de alcorques y renovación de arbolado con el objetivo de “seguir avanzando en la accesibilidad de la barriada de La Orden, con la eliminación de barreras arquitectónicas, para garantizar la libre circulación de las personas con movilidad reducida, pero también con carritos de bebés o de la compra, bicicletas y patinetes eléctricos por todas sus calles”.
En este sentido, la alcaldesa de Huelva ha recordado hoy que “tanto en La Orden, como en la barriada Príncipe Juan Carlos, la construcción de rampas, pasos rebajados, reparación de acerados y reconstrucción de muros copan las obras de mantenimiento, destacando además en cuanto a mobiliario urbano las actuaciones relacionadas con barandas y barandillas de protección” apuntando que “en el último año, el Ayuntamiento de Huelva ha destinado unos 170.000 euros a este tipo de trabajos en esta zona de la ciudad con especiales problemas de accesibilidad”.
Plaza Cristo del Perdón
Las obras de reforma de la Plaza Cristo del Perdón se están llevando a cabo desde el Servicio de Mantenimiento de la Vía Pública de la concejalía de Infraestructuras y Servicios Públicos del Ayuntamiento de Huelva. Entre las actuaciones de accesibilidad, destaca la creación de un nuevo acceso peatonal para unir las dos bolsas de aparcamientos; un carril de entrada que además favorecerá la comunicación directa desde la calle Gonzalo de Berceo a la Iglesia del Perdón.
Así mismo también se están solucionando problemas en las pendientes de las rampas y rebajes de acerados, para adaptarlos a la normativa de accesibilidad y repasando el acerado, para corregir problemas de baldosas sueltas y rotas en unos 400 metros cuadrados de la plaza.
Además, se han retirado dos árboles enfermos y podridos, como los que se tuvieron que cortar hace unos años en la avenida Diego Morón y tras reconstruir y ampliar los alcorques se plantarán otros de la especie ‘celtis australis’, más conocida como almez, un árbol esbelto, pariente de los olmos, evitando además los problemas de raíces. Por último, se reubicarán algunos bancos y contenedores que actualmente dificultan el acceso de los peatones a la plaza.
