La Guardia Civil ha investigado a dos personas por su implicación en un delito contra la salud pública, al vender carne no apta para el consumo humano en una empresa de Trigueros.
Según ha indicado el Instituto Armado en una nota de prensa, estos hechos se han detectado con motivo de las inspecciones que agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) en colaboración de veterinarios oficiales del Registro Sanitario Condado-Campiña realizan para el control de alimentos cuyo consumo pueda suponer un peligro para la salud de los consumidores para que se cumplan con los requisitos de seguridad alimentaria establecidos, cuando procedieron a inspeccionar un almacén de productos cárnicos elaborados (hamburguesas, pinchitos, albóndigas y carne picada) en Trigueros.
Durante el desarrollo de la inspección, los agentes al comprobar el etiquetado de una partida de carne, verificaron que esta no era apta para el consumo humano, por lo que se procedió a la inmovilización cautelar de todos los alimentos procesados, elaborados con la misma, elevando los veterinarios oficiales un Acta de Alerta Sanitaria para la retirada del mercado de todos estos productos por posible peligro inminente y extraordinario para la salud pública, siendo competente la Delegación Territorial de Salud y Consumo en Huelva.
En total, se intervinieron un total de 2.111 kg de hamburguesas, albóndigas y carne.