Seguramente tus hijos ya empezaron a pedirte que les des su propio teléfono móvil y aunque este un poco reacio a dárselos por su edad, sabes que tarde o temprano tendrás que complacerlos. Pero no te preocupes, un teléfono móvil puede convertirse con facilidad en el mejor aliado para ti y para tus hijos, siempre y cuando tomes las previsiones necesarias.
Probablemente tus hijos ya pasan más tiempo conectados a Internet que el que pasan en el sillón viendo televisión. Si no es jugando Minecraft o algún otro juego online del momento, están en YouTube viendo los vídeos de canciones de sus programas favoritos o pasan tiempo en las redes sociales dándole me gusta a alguna imagen graciosa o tomándose fotos con tu teléfono celular o alguna locura similar.
Como padres, es nuestro deber intentar mantener a nuestros hijos a salvo cuando usan cualquier dispositivo móvil. Lo cual es mucho más fácil decirlo que hacerlo, ya que los problemas se multiplican cuando entran a la ecuación los teléfonos celulares y se suman a la lista amenazas potenciales por parte de agentes externos, en caso de no tener la orientación adecuada.
Para empezar, conversen sobre el sexting
Nuestra cultura de estar “siempre en línea” ha creado un ambiente donde los adolescentes pueden tomar decisiones impulsivas, que luego regresarán para afectarlos negativamente. Un ejemplo de esto y que ha llegado incluso hasta los titulares de las noticias últimamente, es el sexting. Cuando las personas toman y envían fotos reveladoras de ellos mismos o envían mensajes sexualmente explícitos vía mensajes de texto, se le denomina como “sexting.”
Los expertos difieren en cuanto a los números, pero el sexting es un problema real que afecta a los adolescentes. A los chicos y a las chicas les gusta “sextear” para impresionar, atraer a alguien, mostrar interés por otra persona o como prueba de amor. Por eso, no esperes a que tu hijo (o uno de sus amigos) sufra un incidente con el sexting antes de hablar de sus consecuencias.
Es cierto, hablar sobre el sexo o de relaciones con adolescentes puede ser incomodo, pero es mejor tener esa charla antes de que algo pase. Recuérdales a tus hijos que una vez que envían una imagen desde tu teléfono móvil, es casi imposible recuperarla y que perderán por completo el control sobre la misma.
Incluso si las imágenes de su móvil, estas son susceptibles a ser sustraídas por terceros para aplicaciones para espiar de WhatsApp. Pregúntales sobre cómo se sentirían si sus maestros, padres o la escuela entera vieran la imagen, debido a que eso es precisamente lo que le sucede todo el tiempo a los que se involucran con esta práctica.
¿Es necesario que un niño pequeño tenga un celular?
Como muchos otros padres, te preguntarás si tu hijo está listo para un teléfono celular. Muchos padres citan la seguridad como la razón principal para darles a sus hijos un teléfono celular. Quieren poder contactar a su hijo en cualquier momento. También quieren darle a su hijo la seguridad de poder contactarlos cuando sea que los necesite.
Esto es especialmente cierto cuando tu hijo tiene que recorrer sólo el camino de regreso a casa después de clase. También los hijos que viven en dos hogares tienden a tener celulares a temprana edad. Esto es para que puedan contactar en cualquier momento al otro progenitor.
La mayoría de los expertos coinciden en que no es apropiado que los niños menores de 7 años tengan teléfonos celulares. Ya queda a criterio de cada núcleo familiar decidir cuál es la mejor opción.
Como mantener a tus hijos a salvo cuando tengan un teléfono celular
Educa a tus hijos sobre los peligros del teléfono o en línea.
Enséñales a tus hijos a no contestar llamadas de números desconocidos o contestar mensajes de texto de los que no conozcan al remitente. También debes advertirles que no compartan ningún tipo de información personal de manera pública en Internet. Como por ejemplo, su dirección o la escuela a la que asisten.
Establece de antemano algunas reglas de uso
Antes de entregarles un teléfono a tus hijos, explícales que es lo que tienen permitido hacer con el equipo. A qué horas se les permitirá usarlo, lo que tienen que hacer si terminan en un sitio web “malo,” etc. Coloca estar reglas por escrito y asegúrate de que entiendan el comportamiento que esperas de ellos.
Actualiza sus dispositivos móviles
Antes de dejar que tu hijo conduzca, tú te aseguras de que su vehículo sea seguro, ¿cierto? Como padre, necesitas hacer exactamente lo mismo con su teléfono móvil, tablet u otro dispositivo que tu hijo utilice. Existe una multitud de software de vigilancia para móviles que podría comprometer el uso de su equipo.
Para asegurarte de que sus dispositivos estén listos para navegar el internet o hacer llamadas. Aplica todas las actualizaciones de seguridad y del sistema operativo que necesiten, no olvides descargar la versión más segura y estable de las apps (que tus aprobado) que usarán.
Considera utilizar un software de monitoreo y control parental
Otra gran alternativa es usar un software de monitoreo para estar al tanto de las actividades que realizan tus hijos en tu móvil. mSpy es una completísima aplicación de control parental que es sumamente fácil de usar y que te brinda detallados informes de las actividades que se realizan en el teléfono de tu hijo con suma facilidad y rapidez.
Estas aplicaciones sirven como un importante complemento para cualquier otra medida, que como padre decidas tomar para mantener a tus hijos seguros cuando usan un dispositivo móvil.
Limita el tiempo que están al teléfono
Establece las horas y límites de tiempo durante el que pueden estar en la pantalla del teléfono. Acuerda con ellos un horario que no interrumpa las actividades familiares ni la realización de sus tareas escolares y deberes del hogar. También puedes programar que la conexión a Internet de tu hogar se apague durante las altas horas de la noche, que es cuando se pueden ver tentados a aventurarse a territorios inapropiados y peligrosos.