No es habitual ver a Francisco Bella, ex alcalde de Almonte y actual senador por el PSOE, amén de candidato al Congreso en la lista socialista para dejar paso a Petronila Guerrero en el Senado, dar una rueda de prensa en el chalesito que tiene el PSOE como sede en Huelva. Bueno, pues el milagro se obró este pasado jueves, día en el que pasó desapercibido por todo el revuelo que había por la detención de Juan José Cortes. Bella utilizó el manual de campaña socialista y acusó a los populares de recortes y más recortes, en lo que es la única estrategia que parece quedarle al PSOE para recuperar algunos votos: meter el miedo en el cuerpo de los votantes de la izquierda. «Lo del club de la tijera o de los recortes» incluso es una frase ingeniosa, pero donde se pasó varios pueblos y de frenada fue cuando acusó a los alcaldes del PP de estar provocando la situación de algunos ayuntamientos para así dejar en mal lugar a los anteriores gobiernos municipales socialistas. Ese argumento es tan descabellado que mejor se lo ahorra para próximas ocasiones, porque nadie puede entender que los alcaldes de Valverde o Aljaraque sean tan malvados como para dejar a sus trabajadores varios meses sin cobrar por una simple estrategia electoral. Que las cuentas de todos, todos, todos, los ayuntamientos, salvo alguna muy honrosa excepción, estén rematadamente mal es responsabilidad tanto de la crisis general que vivimos como de la pésima gestión que algunos alcaldes han realizado. Todos están mal, pero unos mejor que otros. Lo de Valverde o Aljaraque ha sido el colmo de la mala gestión… y ahì están sus dos ex alcaldes sacando pecho, uno como delegado de la Junta y el otro como portavoz en la Diputación. ¿Así es como se paga a los pésimos gestores?