La empresa Matsa iniciará en breve la rehabilitación de la Casa Dirección de Sotiel Coronada, uno de los edificios mineros más antiguos y singulares de esta pedanía onubense. El proyecto podrá hacerse realidad próximamente, una vez que la compañía ha tomado posesión judicialmente de esta casa, después de varios años de reclamación en los tribunales.
El edificio pasó a ser propiedad de MATSA tras la adquisición de los terrenos de la mina ubicada en esta pedanía, pero fue ocupado durante años de manera ilegal. Ya recuperado, la compañía llevará a cabo la reconversión de este espacio para que pueda ser utilizado como casa de huéspedes en un futuro. Con ello contribuirá al mismo tiempo a la conservación y puesta en valor de este histórico inmueble, que forma parte del patrimonio minero de la provincia de Huelva.
La Casa Dirección es una de las primeras edificaciones en Sotiel Coronada, anterior a la existencia de la propia pedanía, que comenzó a levantarse en 1883, con la llegada de la empresa portuguesa “Companhia Mineira Sotiel Coronada”. Sin embargo, el edificio aparece en planos antiguos datados en 1867, y es posible que fuese construida incluso dos décadas antes, ya que es citada en documentación de la época. Por tanto, su antigüedad supera los 150 años.
Durante este período ha tenido diferentes usos. En los primeros archivos que evidencian su existencia se la identifica como Casa Dirección, pero, a comienzos del siglo XIX, fue ya empleada como casa de huéspedes por The United Alkali Ltd, además de como edificio de oficinas. Su salón ha acogido importantes reuniones y visitas institucionales a lo largo de su historia, de la mano de las empresas que han sido propietarias de la mina Sotiel Coronada.
En 2001 quedó en desuso, cuando mina Sotiel fue clausurada por la empresa Almagrera y pasó, posteriormente, a ser propiedad de MATSA con su reapertura. Gracias a su reciente recuperación, este emblemático edificio podrá seguir engrandeciendo su valor como parte destacada del patrimonio minero onubense.
La directora general de la empresa, Audra Walsh, ha mostrado su satisfacción “porque el proceso se haya resuelto finalmente, permitiendo que MATSA pueda custodiar de la manera más adecuada este exponente del legado minero de la provincia”.