Cuatro años y medio de cárcel es la pena que solicita la Fiscalía para el encargado de una finca agrícola de Moguer, al que se acusa de presuntos delitos de acoso y abuso sexual a tres temporeras de nacionalidad marroquí. 36 meses son por cuatro presuntos delitos de acoso sexual y un año y medio por abuso sexual. Además se solicita una indemnización para cada una de las trabajadoras de 3.000 euros por los daños morales provocados por el acoso y de 6.000 euros por los daños morales causados a la trabajadora por la que se acusa del delito de abuso sexual.
La acusación de la Fiscalía recoge que el acusado trabajaba como encargado en una finca situada en el Paraje de Las Malvinas, supervisando el trabajo de producción, de modo que «se relacionaba directamente con los trabajadoras de la finca, teniendo poder de dirección sobre ellas».
Las tres ciudadanas marroquíes, pertenecientes al programa de contratación en origen, comenzaron a trabajar como peones agrícolas no cualificadas. Según la acusación, el encargado, «abusando de su posición y de la situación de vulnerabilidad de las trabajadoras, procedió a hostigar» a estas trabajadoras con «ánimo de coartar su libertad sexual hasta el punto de observar reiteradamente comportamientos como entrar en la vivienda donde estaban alojadas sin permiso, aproximarse físicamente a las mismas sin justificación cuando estaban en sus puestos de trabajo y permanecer en dicha vivienda cuando las trabajadoras estaban en la ducha, haciéndoles gestos de connotaciones sexuales para solicitar favores sexuales».