El Ayuntamiento de Aracena continúa trabajando en la conservación y protección del legado histórico y patrimonial de la localidad, en este caso, con la restauración de dos retablos de la Iglesia Prioral del Castillo, ubicados en las capillas del fondo de la nave central, que se encontraban en muy mal estado de conservación.
Se trata de los retablos de La Virgen de la Rosa y de Santa Catalina. El primero es una obra anónima, de transición del Gótico al Renacimiento que dispone de 9 tablas policromadas e incluye una leyenda referente a la fecha de terminación, 1529. El Retablo de Santa Catalina es una obra anónima, de estilo plateresco, perteneciente a la escuela sevillana de la segunda mitad del S.XVI. Dispone de 11 tablas policromadas que representan a diversos santos y a la crucifixión en el ático. Este último retablo fue donado por Miguel Sánchez Dalp y se salvó de los sucesos de 1936.
La restauración está siendo efectuada por el equipo del restaurador Jesús Mendoza que ya ha dirigido otros trabajos en Aracena, como la recuperación de las pinturas de la Iglesia de Corterrangel y la Iglesia de Santo Domingo, así como el Retablo Mayor de la Iglesia Prioral del Castillo.
Para no interferir a las visitas turísticas del Castillo, los retablos se han desmontado para llevar a cabo su restauración en el interior de la Iglesia de Santo Domingo, un lugar que, además, no altera las condiciones ambientales a las estaban sometidas las obras en su lugar original.
Esta mañana, el improvisado taller ha recibido la visita del alcalde de Aracena, Manuel Guerra, que ha calificado de «muy grato, sorprendente y fascinante conocer el proceso de restauración de estos retablos que históricamente casi han pasado desapercibidos y que son dos obras de arte de gran nivel». Guerra ha valorado el merecimiento del rigor histórico y artístico con el que se están recuperando. «Se está devolviendo dignidad y esplendor a estas obras que podrán ser disfrutadas por todos, engrandeciendo así el patrimonio histórico y monumental de Aracena».
Jesús Mendoza ha informado de las particularidades de estos retablos, ambos pinturas sobre tabla. «El de la Virgen de la Rosa está en líneas generales en muy buen estado de conservación, presentando únicamente un oscurecimiento de los barnices, por lo que con la limpieza se podrá recuperar el color original. Por su parte, el de Santa Catalina de Alejandría está dando una gran sorpresa en la limpieza de cada tabla porque están saliendo los colores primitivos que estaban debajo de un retinte general que se le dio después del incencio que hubo en la Iglesia del Castillo».
Mendoza ha comentado aquella intervención que se hizo con un ánimo de reparación y de la que se pudo encargar algún artesano o pintor local para tapar con pintura los desperfectos provocados por el incendio. «Tapó las pinturas del S. XVI que estamos recuperando ahora y son de bastante más calidad, pero al mismo tiempo permitió que hayan llegado hasta nuestros días». La calidad de las pinturas que se están descubriendo entroncan con las mejores escuelas sevillanas o europeas del S. XVI, «con unos detalles y minuciosidad en los pliegues y paisajes de fondo que son una maravilla. Retablos de una gran calidad que habían permanecido ocultos a nuestros ojos desde que se repintó y, no existir documentación anterior, es algo inédito lo que estamos recuperando», ha afirmado Mendoza.
El proceso de restauración comenzó a finales de febrero y ha tenido una primera fase de fijación de la policromía y limpieza de los dorados, que tenían múltiples capas de purpurina. Ahora está en la fase final, que es la de retocar las faltas que tiene en superficie la policromía y los daños, para devolver una unidad cromática a la obra.
Antes del montaje definitivo en la iglesia, el Ayuntamiento pretende hacer una exposición en el mes de agosto para que se puedan contemplar las tablas de forma individual, apoyadas en unos paneles explicativos con fotos del proceso de restauración.
La actuación se está realizando a través de la subvención de la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía destinada a Municipios Turíticos, que sufraga el 100% de la misma, y que también va a permitir su adecuación museográfica, con la colocación de señalética explicativa y una mejora de la iluminación, con un presupuesto de 52.000 euros.