Cuatro mujeres marroquíes -Jamila Benkhaek, Fatima Belchich, Jamila Jamal y Jemaa El Majdoubi- ya trabajan en su propio negocio en su país gracias a una iniciativa impulsada por la Diputación de Huelva, la empresa Agromartín y por Convive Fundación Cepaim. El convenio firmado entre las tres instituciones ha permitido la puesta en marcha de este proyecto piloto de apoyo al emprendimiento de las mujeres marroquíes contratadas en origen.
Las cuatro mujeres emprendedoras llegaron a Huelva para trabajar en el sector agrícola, lo hicieron con contratación en origen -es decir que vinieron a España con un contrato de trabajo de tipología y duración determinada- y fueron beneficiarias de la iniciativa, consistente en la selección y formación de un grupo de mujeres con voluntad de iniciar negocios en Marruecos para que reinviertan en sus lugares de origen.
Para ello cuentan con acompañamiento durante todo el proceso, tanto en España como en Marruecos una vez que retornen tras la finalización de la campaña agrícola. Otro de los objetivos es que las participantes puedan crear cooperativas en el territorio para favorecer su autonomía y contribuir al desarrollo del lugar en el que residen.
En el marco del seguimiento del proyecto, las entidades participantes han realizado una visita en terreno con el objetivo de conocer las actividades de las mujeres emprendedoras, en concreto una reunión con la empresa Vivo Consult y la visita de dos de las iniciativas empresariales (cooperativas) en Agadir y Ouarzazate.
En el primer encuentro, Jamila Benkhaek, que acaba de beneficiarse del estatuto de autónoma, informó de la necesidad de seguir adquiriendo el equipamiento adecuado y un local como punto de venta, para culminar la última fase del negocio de panadería y pastelería en su barrio.
En la segunda visita a la cooperativa Rachmate Ouazguite que acaba de constituirse, las mujeres socias manifestaron su interés de seguir vinculadas a la empresa Vivo Consult, a quien invitaron a asistir a las diferentes etapas del tejido de alfombras tradicionales. Del mismo modo, manifestaron su necesidad de terminar de conseguir el primer capital de inversión para el suministro de materias primas (lana y fibras tejidas), para una operación de venta inicial equivalente a 10 alfombras estándar, en un monto de alrededor de 8.000 a 10.000 dirhams.
La reunión de trabajo en las instalaciones de Vivo Consult se ha centrado principalmente en el trabajo que lleva a favor de las mujeres trabajadoras de la empresa Agromartín en particular, objeto de la visita de seguimiento, una vez presentadas la misión, visión y el trabajo de cada entidad.
La Diputación de Huelva, Agromartín y Convive Fundación Cepaim siguen apostando por la continuidad del proyecto con un nuevo convenio en 2023. El siguiente paso es añadir otras mujeres líderes de proyecto apuntando a otras dos o tres regiones, centrándose preferentemente en las mismas regiones administrativas de Marruecos tanto para concentrar y optimizar esfuerzos como para dar la imagen más amplia posible en el ecosistema socioeconómico.
Por otra parte, en Huelva está previsto que se organice una jornada de puertas abiertas para capitalizar la experiencia de los primeros cuatro microproyectos exitosos, invitando a la agrupación de otras empresas interesadas por el proyecto en su dimensión global.
Agromartín, empresa comprometida con sus trabajadoras
En una visita a la empresa Agromartín donde se inició la colaboración para el proyecto, la presidenta de la Diputación, María Eugenia Limón, agradeció a Agromartín que, junto a la mejora y cuidado de las condiciones laborales y personales de las temporeras durante su estancia en nuestra provincia, «haya puesto encima de la mesa esta iniciativa que quiere mejorar también su calidad de vida en sus lugares de origen, dotándolas de las herramientas necesarias para que puedan crear riqueza y empleo en sus propios municipios».
Agromartín lleva años contratando a mujeres procedentes de Marruecos y ofreciéndoles las mejores condiciones durante su estancia de trabajo, cudando instalaciones donde viven las temporeras, hasta unas 800 en la campaña de fresa. El compromiso social de Agromartín con sus trabajadoras ha llevado a la empresa a desarrollar diferentes acciones en las últimas campañas para integrar a los diferentes contingentes de trabajadoras que llegan a sus fincas. El objetivo es fomentar la igualdad, la diversidad y la plena integración de estas mujeres, favoreciendo que expresen su identidad cultural y disfruten una convivencia agradable y amena durante su estancia en la provincia de Huelva
La labor ejemplar de Agromartín fue premiada en el año 2014 con la Medalla de Oro de la Provincia de Huelva por sus valores humanos y su compromiso social con sus trabajadores y trabajadoras. «Agromartín practica una cultura empresarial que ha demostrado que el éxito se consigue cuando el objetivo es mejorar el entorno más allá de la actividad propia de la empresa y que ser socialmente responsable optimiza la eficiencia porque los empleados trabajan mejor en este entorno y porque la transparencia aumenta la confianza de los consumidores. Toda una lección de economía que nace de nuestro tejido empresarial para transformar la realidad», recogía el expediente de la Medalla de Oro.