Un centenar de personas con discapacidad ha participado en la 24 edición del Programa ‘Un Baño Sin Barreras’ gracias a un equipo integrado por 30 voluntarios y voluntarias de Cruz Roja Huelva, que han hecho posible que las dificultades de movilidad no fueran un obstáculo para disfrutar plenamente de la playa, algo que sería imposible sin la unión de fuerzas de la Organización humanitaria, el Ayuntamiento de Huelva y el Ayuntamiento de Cartaya.
El esfuerzo, la formación y el compromiso del voluntariado de Cruz Roja, el patrocinio del Ayuntamiento de Huelva y la colaboración del Ayuntamiento de Cartaya, que facilita material y el espacio en la playa, han sido los motores que han hecho funcionar este año el programa ‘Un baño sin barreras’, que en palabras de de las personas voluntarias, “ha vuelto a llenar los meses de julio y agosto de historias de superación, amistad y solidaridad”.
“Algo que parece tan sencillo como pasear por la arena o darse un baño en el mar es muy complicado, incluso imposible, para muchas personas, por eso es tan conmovedor y satisfactorio ver sus miradas al poder bañarse en los anfybuggys”, señala el equipo, mientras destaca también “los lazos de cariño que se crean con las personas usuarias, hasta incluso convertirse en amistades duraderas, con contacto, visitas y vivencias compartidas ya durante todo el año, a la espera de volver a encontrarnos y disfrutar de la playa”.
En el programa han participado Aspacehu, Aspapronias, Faisem, el Centro de Personas Mayores de La Orden, la Asociación de Enfermos Renales Alcer y la Residencia de Personas Mayores de Cartaya, además de numerosas personas particulares que contactan directamente con Cruz Roja.
Servicio Integral para el baño
Como siempre, los voluntarios y voluntarias han prestado un servicio integral, que incluye la recogida de las personas usuarias y sus acompañantes en su domicilio, previa llamada a la ONG, y en la sede de las asociaciones adscritas, así como el transporte hasta la playa, donde les ayudan a bañarse, gracias a cuatro vehículos anfibios denominados anfibuggy, al tiempo que hacen posible que pasen una jornada de convivencia y diversión en las carpas habilitadas para el disfrute de cada jornada
Al cierre del programa, la alcaldesa de Huelva, Pilar Miranda, señaló que «el Ayuntamiento de Huelva no duda en poner recursos a disposición de Cruz Roja para garantizar el traslado de las personas de muy diversas asociaciones de atención a colectivos vulnerables, contribuyendo así a eliminar cualquier barrera y que quienes lo tienen más difícil en su día a día puedan disfrutar del mar y de la diversión compartida en la playa, algo que difícilmente podrían hacer sin esta unión de fuerzas para que sea posible”.
De su lado, el alcalde de Cartaya, Manuel Barroso, destacó “la apuesta del Ayuntamiento por mejorar la accesibilidad de las playas cartayeras y el apoyo municipal a este programa, una iniciativa extraordinaria para la que ponemos a disposición de Cruz Roja toda nuestra infraestructura y una playa totalmente accesible con pasarelas, duchas y carpas con zonas de sombra para personas con movilidad reducida y tres anfibuggys». Esta implicación, subrayó Barroso, demuestra «el compromiso municipal con una playa accesible, inclusiva y apta para todos y todas, donde cualquiera pueda darse un baño sin impedimentos».
Para todo ello, Cruz Roja Huelva se vuelca en la organización de un equipo de voluntariado procedente de distintas áreas asistenciales de la Organización, desde técnicos/as sanitarios a socorristas acuáticos, pasando por educadores/as sociales, hasta conductores/as de vehículos adaptados, de vehículos de apoyo y voluntariado de acompañamiento, todos formados con anterioridad para garantizar la seguridad de todas las personas usuarias en los baños en el mar y para desarrollar las acciones de animación con paseos por la orilla del mar, charlas, talleres, juegos y otras actividades lúdicas que ayudan a normalizar la vida de las personas con movilidad reducida eliminando barreras y llenado de alegría su verano.