El coordinador provincial de Izquierda Unida (IU) en Huelva, Marcos Toti, ha exigido al presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, que “de carpetazo definitivo” al “atentado” que supone la Proposición de Ley sobre los regadíos de Doñana, “independientemente de las negociaciones con el Gobierno Central”, ya que el propio presidente sabe que es “un callejón sin salida” que “mientras más se alargue más daño hará al sector y a la reputación del sector de los frutos rojos de Huelva.
Toti ha realizado estas declaraciones en el Parlamento de Andalucía, a donde ha acudido para presenciar la pregunta parlamentaria que se compañera de Por Andalucía en la Cámara andaluza, Inmaculada Nieto, ha realizado al presidente de la Junta de Andalucía y en la que le pedía soluciones “realistas” a la situación del Parque Nacional y Natural.
Lamentamos, ha aseverado Toti, que Moreno Bonilla se haya “salido por la tangente” e insista en reservar la PDL en el cajón de salida en el caso de que no fructifiquen las negociaciones con el Gobierno, yendo en contra, ha recordado, de los organismos internacionales como la UNESCO, la NASA, el Tribunal Superior de Justicia Europeo, que han dejado “muy claro” que esa ley no se puede hacer “por mucho que Moreno Bonilla se empecine en engañar a los agricultores”.
Además, estima Toti, hay que generar una economía paralela para garantizar el empleo y el futuro en la comarca del Condado, algo que en lo que “ya debería estar el Gobierno andaluz, en lugar de negar la realidad que el Cambio Climático está trayendo a la zona”.
Para Toti, la Ley de Amnistía a los regadíos ilegales de Doñana está “suponiendo un mazazo no solo por el prestigio del Parque Nacional sino también a la venta de frutos rojos en los mercados europeos y por tanto perjudicando a la inmensa mayoría de agricultores que sí hacen la cosas bien”.
En este sentido Toti ha recordado que ya hay iniciativas de los supermercados europeos para evitar que se compren fresas regadas con agua ilegal en los mercados europeos y que el hecho de “eternizar la amenaza de esta ley solo puede ir en perjuicio de la imagen del sector, ya que los consumidores no distinguen entre las fresas que se cultivan con garantías y las que se llevan a cabo saqueando Doñana”.
Así, diversas asociaciones ecologistas han estado recientemente en la Feria Mundial Fruit Attraction donde han solicitado a los grandes distribuidores estándares y auditorías que garanticen que los frutos rojos se cultivan con agua legal.
