El Ayuntamiento de Punta Umbría presenta alegaciones al proyecto de Real Decreto por el que se va a modificar el Reglamento General de Costas. El principal objetivo del Consistorio puntaumbrieño es que la normativa reconozca la singularidad del litoral onubense y que se tenga en cuenta el interés público de los chiringuitos.
El alcalde de Punta Umbría, José Carlos Hernández Cansino, ha adelantado que el nuevo reglamento “debe tener en cuenta las especiales circunstancias de la Costa de la Luz en cuanto al tamaño de las playas, pues no pueden tener la misma norma los chiringuitos de una calita del Mediterráneo que los de una amplia playa de la costa onubense”. De ahí que haya invitado “a otros ayuntamientos costeros e instituciones a sumarse”.
La singularidad del litoral de la Costa de la Luz, y el de Punta Umbría especialmente, viene marcada por el alto volumen de arena que poseen sus playas y la alta capacidad de usuarios que pueden acoger.
Del mismo modo, esta singularidad también incide en la condición de la localidad como Municipio Turístico y en la utilidad pública y de interés social de los chiringuitos, cuestión aprobada por la Corporación Municipal en el Pleno del 28 de julio de 2021. Hernández Cansino ha indicado que “estos tradicionales establecimientos no sólo crean una importante actividad económica, sino que son un elemento clásico y de interés que genera espacios de ocio y dinamizan la playa sin obstaculizar el uso del litoral por parte de otras personas”.
Por otra parte, el Ayuntamiento puntaumbrieño también va a pedir que se introduzca en el Reglamento de Costas una tercera tipología de playa: la ‘semi-urbana’, que se sumaría a la urbana o natural. El principal objetivo de esta acción es que se puedan prestar servicios de calidad a los bañistas, respetando el medio ambiente, en zonas del litoral que no están en el frente urbano pero que tienen una alta afluencia, como es el caso de la playa de La Bota.
El Consistorio va a proponer el cambio de distintos artículos de esta norma para que en las playas naturales los establecimientos expendedores de comidas y bebidas sean desmontables y no puedan exceder de 90 metros cuadrados, de los que sólo 40 serán cerrados.
Con respecto a las playas urbanas, y a la nueva catalogación sugerida de playas semi-urbanas, el Ayuntamiento de Punta Umbría propone una ocupación de los chiringuitos de un máximo de 200 metros cuadrados, de los que 150 serán cerrados.