La Unidad de Cardiología de Hospital Infanta Elena está impulsando su consulta específica de Dolor Torácico, que está destinada a aquellos pacientes que llegan al Servicio de Urgencias con dolor en el pecho y requieren, para su diagnóstico, de un estudio en profundidad que debe llevarse a cabo por parte de especialistas, si bien no pueden esperar a ser citados en una consulta programada. Se trata de situaciones en las que aparece una sospecha de síndrome coronario agudo, pero no puede confirmarse a través de pruebas convencionales.

La consulta específica se encuentra atendida por especialistas en Cardiología y personal enfermero, con el fin de hacer frente a la incertidumbre diagnóstica que se presenta en algunos casos de pacientes con dolor torácico. Este dispositivo, por el que pasan anualmente alrededor de 150 pacientes, permite agilizar el diagnóstico y, por tanto, la implantación de un tratamiento acertado, evitando el ingreso innecesario del paciente para la realización de dichas pruebas.

El éxito de esta consulta radica en la colaboración continua entre el Servicio de Urgencias del centro y la Unidad de Cardiología, que permite la asistencia de este tipo de pacientes en un plazo que oscila entre la asistencia especializada inmediata o, como máximo en un plazo que oscila entre las 24 y las 48 horas, mejorando así la eficacia del tratamiento y la recuperación del paciente.

Cuando un paciente llega a Urgencias con dolor torácico, puede tratarse de un dolor no anginoso, provocado en su mayor parte por ansiedad o dolor muscular, entre otras causas o bien puede tratarse de un síndrome coronario. En caso de tratarse de una patología crónica, puede ser visto en Consultas Externas de forma adecuada, pero si se trata de un evento agudo o infarto de miocardio, va a requerir de un ingreso en el centro hospitalario.

El problema surge cuando la adopción de un diagnóstico certero, por tratarse de síntomas atípicos, requiere de estudios más complejos que determinen la naturaleza de la patología. Es entonces cuando se activa la consulta de manera inmediata en horario de mañana o, si se produce en horario de noche, se ingresa directamente en Observación para ser atendido en consulta apenas unas horas más tarde.

Una vez trasladado a Cardiología, pueden realizarse de forma rápida tanto un ecocardiograma o ecografía del corazón, como una ergometría, también llamada prueba de esfuerzo, además del estudio, en el Laboratorio, de todas las determinaciones analíticas que permitan diagnosticar sin posibilidad de error, un evento cardiovascular agudo.

Es necesario recordar que la posible asociación del síntoma de dolor torácico con una patología potencialmente mortal y el dato de que en el 50% de los casos aproximadamente la situación del paciente es compatible con síndrome coronario agudo (SCA) provoca un importante número de ingresos innecesarios que se podrían evitar con un diagnóstico inicial más preciso. Estos ingresos generan numerosas molestias y riesgos, pese a que en menos de la mitad de ellos se confirma finalmente el diagnóstico inicial de enfermedad coronaria que motivó la hospitalización.

Este protocolo de trabajo y el dispositivo diseñado por los cardiólogos del centro implica también una mejor y más eficiente atención en el área de Urgencias, teniendo en cuenta que la evaluación del paciente con dolor torácico supone entre el 5 y el 20% del volumen total de Urgencias atendidas.

Esta consulta responde a los objetivos marcados por el centro hospitalario para agilizar la asistencia sanitaria en aquellos casos en los que el factor tiempo supone una baza fundamental para la supervivencia del paciente o la reducción de las complicaciones asociadas, siempre con la intención de mejorar la calidad de vida y los niveles de salud de la población a la que atienden.

Consejos en el Día Mundial del Corazón

En cualquier caso y aprovechando que esta semana se celebra el Día Mundial del Corazón, los profesionales de la Unidad han querido recordar a la población la importancia de mantener unos hábitos de vida saludables, fundamentales para el cuidado de su salud cardíaca. Una alimentación equilibrada que evite la obesidad, la práctica de ejercicio físico adaptado a las diferentes edades de manera habitual, la reducción del consumo de alcohol y el abandono del tabaquismo resultan claves para seguir manteniendo un corazón sano y fuerte.