Las pérgolas bioclimáticas son un artículo innovador en el mercado desde hace años debido a las posibilidades que ofrecen. Es un elemento arquitectónico utilizado mayormente en exteriores, que sirve para regular la temperatura de una forma natural y sin la necesidad de la intervención humana.
A pesar de que es un elemento de otros tiempos, está diseñado con materiales y sistemas sofisticados, lo que las hace tendencia en la actualidad. Las pérgolas bioclimáticas están aquí para quedarse y demostrar cómo obtener una mayor eficiencia energética en los hogares.
A continuación, se muestran más detalles sobre las pérgolas bioclimáticas y cómo hacen un jardín o terraza más funcional.
¿Qué es una pérgola bioclimática?
La pérgola bioclimática es un sistema de protección contra la radiación solar que se puede colocar en jardines, terrazas o cualquier otro espacio en el exterior, todos los días del año. Consiste en una estructura fabricada con madera o aluminio, con lamas orientables, que regulan la temperatura, luz, humedad y el flujo de aire, al mismo tiempo que resguardan contra la nieve o la lluvia, haciendo de la estancia del usuario más agradable ante cualquier clima.
¿Cómo funciona una pérgola bioclimática con lamas orientables?
Este elemento no solamente permite regular la cantidad de luz, sino que decora el espacio donde se encuentra, dándole un efecto de mayor calidez y confort, mejorando la estancia. Asimismo, con las lamas orientables, es posible hacer los ajustes que se consideren necesarios para regular los sistemas de protección y disfrutar el año entero.
Pero, si se va a colocar una pérgola bioclimática en una terraza, lo más recomendable es consultar con un experto sobre las normas establecidas en la Comunidad Autónoma. Ya que, hay lugares en los que el empleo de este tipo de sistemas no está permitido en terrazas.
Ahora bien, las lamas se pueden orientar en tres posiciones que son 45 grados, cerradas o abiertas. Al estar cerradas, el sol y el agua de lluvia no pueden entrar. Además, son redirigidas por medio de bajantes y canales dentro de la misma estructura, la cual se filtra hacia los laterales.
Para hacer la instalación de una pérgola bioclimática se debe anclar dicha estructura al suelo, lo que le confiere mayor seguridad, especialmente si hay niños o mascotas. También se basa en cuatro pilares o seis, sosteniéndola contra la pared, aunque sí se trata de un modelo portátil, estas suelen tener mejor estabilidad.
Ventajas de las pérgolas bioclimáticas
Las pérgolas bioclimáticas transforman un jardín o terraza en un sitio de diversión, placer y relajación, no importa el clima del momento. Entre las ventajas más importantes destacan:
- Protección contra el sol: las lamas de las pérgolas bioclimáticas protegen a los usuarios contra los rayos solares, la entrada de luz y regulan la temperatura. Además, es posible ajustarlas para evitar el efecto invernadero y garantizar que el aire se renueve de manera constante.
- Regulación del flujo de aire: es posible ajustar el flujo de aire y prevenir las rachas de viento gracias al cierre hermético en su cubierta. Los modelos con cortinas de cristal actúan como barrera en toda el área, lo que permite disfrutar del exterior en cualquier tipo de clima.
- Aislamiento contra lluvia: el cierre completo de las lamas permite que los usuarios estén aislados de la lluvia. También tienen un sistema de desagüe que evita que el agua se acumule o caiga en el interior cuando se abren las lamas.
- Mayor eficiencia energética: las pérgolas bioclimáticas más nuevas son ideales para controlar la temperatura en los hogares, dando sombra y disminuyendo el consumo eléctrico con equipos de climatización.
- Fácil de instalar: solamente hay que anclar su base al piso, lo que no requiere de una obra en casi todos los casos.
- Personalizables: hay diseños de todo tipo, desde acabados modernos hasta atemporales, lo que permite reflejar el estilo del usuario, estar conforme con el entorno y actualizar un salón, cocina, despacho o espacio exterior.
- Máxima seguridad: tienen un sistema de anclaje para mayor estabilidad y seguridad cuando hay mascotas o niños.
- Fácil mantenimiento o limpieza: al contrario de lo que sucede con otros toldos o sistemas de protección, una pérgola bioclimática es fácil de limpiar y mantener. Tanto las lamas como la estructura requieren únicamente de agua y un jabón neutro.
¿Cuál es la mejor pérgola bioclimática para el hogar?
Las pérgolas bioclimáticas de Durmi brindan máximo confort y personalización para satisfacer las exigencias de los usuarios. Entre los criterios para seleccionar un modelo y configurarlo a medida, se debe considerar lo siguiente:
- Buscar las dimensiones adecuadas: en el mercado existen pérgolas de varios tamaños, pero en el caso de no encontrar alguna que se ajuste, es posible solicitar la fabricación de una a medida.
- Elegir una instalación según el uso deseado: está el formato de pérgola autoportante o adosada, la primera alternativa se trata de una base prefabricada con 4 soportes, que se fijan donde el usuario desee. También, hay el modelo dúplex, que viene con 6 patas y abarca una superficie mayor.
Al momento de elegir una pérgola bioclimática se debe prestar atención a la calidad de los materiales utilizados, de este modo se garantiza una mayor duración y rentabilidad de la inversión realizada.
