(Firma: Paco Morán) Pues para mí fue una tarde redonda. Porque si aplicamos la máxima del fútbol en la que decimos que jugar bien es ganar aplicando las matemáticas, el Recre jugó como jugó, pero gana ventaja.

Y es que no pudo salir mejor la tarde mirando la clasificación. Estamos mucho mejor clasificados que a las seis de la tarde antes del partido ante el Marbella.

Si comemos un punto al líder Cartagena y aumentamos nuestra ventaja respecto al quinto clasificado, son argumentos para decir que la tarde fue redonda. Esto es incuestionable.

Ahora podemos discutir si el juego no fue el que deseábamos o que el fútbol se juega ante un equipo que también quiere ganarte.

El Recre notó la ausencia de Tropi y ello influyó en la primera parte al ver a un equipo que no acababa de definir la demarcación del ausente. Yo, particularmente, ni vi bien a Jesús Valentín ni a Iván González en el pivote. Pero no deja de ser esto una opinión personal y para nada puedo ponerme a la altura del entrenador, que es el que sabe de esto. Para mí los centrales son centrales y no lo saques de su hábitat.

Ya en la segunda mitad parecía algo más asentado el equipo, pero sin llegar a generar esas ocasiones de gol que se están resistiendo en las últimas jornadas. Cada cual vierte su opinión sobre el cómo llega el equipo a esta parte del campeonato. Teniendo los elementos adecuados, veo que este Recre sigue su camino hacia la primera plaza en el tramo más importante el campeonato. Caen los grandes del grupo y cada partido el valor de los puntos tiene mayor importancia. De ahí que para nada saliera descontento con el punto logrado ante un Marbella que se ha reforzado muy bien y con talonario en el mercado del invierno, algo a lo que no ha podido optar el Decano.

A Óscar Carazo no le dieron un talón, sino unas cuantas monedas.

Vamos en la línea adecuada para llegar al 19 de mayo en las mejores condiciones. Hay un equipo técnico que está trabajando con el calendario en la mano para ver si la condición física del equipo supera a la del resto.

La mini pretemporada que está haciendo ahora David Torrejón con un trabajo de sobre esfuerzo tiene la mejor intención del mundo en esas curvas que los preparadores físicos adecuan para diferentes épocas del año.

No sé si alguien salió preocupado del Colombino, pero si es así, tiene un problema, porque los datos no dejan lugar a la duda sobre el gran momento del Decano: lleva quince partidos sin perder, el domingo podría ser líder y saca dos partidos de ventaja al equipo que marca la promoción de ascenso.