La provincia de Huelva llegará el próximo año a la gran pantalla gracias a la película ‘Los Tigres’, dirigida por Alberto Rodríguez, y rodada en la geografía onubense como escenario principal. El equipo de la producción -que ha grabado las últimas escenas en Mazagón, tras dos meses de intenso trabajo- ha recibido la visita del presidente de la Diputación, David Toscano y la diputada de Turismo, Ana Delgado.
En el set de rodaje, ubicado en una casa junto a la playa, los representantes de la institución provincial han asistido a la grabación de algunas de las escenas el film con sus dos protagonistas, Antonio de la Torre y Bárbara Lennie, y conversar con ellos, con el director y el resto del equipo sobre los detalles del proyecto y sobre cómo ha sido su experiencia en la provincia onubense.
“Nos hemos sentido de maravilla, con una acogida total”, asegura el productor Koldo Zuazua, que ha elogiado las bondades de la provincia de Huelva: “sus paisajes, su luz, su metereología, la gente…”. Según indica, “al ser una provincia en la que no se ha rodado mucho, venir con un rodaje de esta envergadura es un acontecimiento y nos han abierto las puertas a cada paso; es muy grato encontrar a la gente dispuesta a colaborar con entusiasmo y con una ilusión bárbara”.
El productor afirma que la Diputación y la Agencia Destino Huelva “se han volcado con nosotros: a nivel de localizaciones, facilitándonos todo tipo de trámites, de gestiones administrativas, ofreciéndonos lugares, con el alojamiento; económicamente hemos tenido una ayuda inestimable, y en la intermediación con otras instituciones, como el Puerto o Cepsa. Han tenido un comportamiento ejemplar”.
Una película que retrata una parte de la esencia de Huelva “a través de dos personajes muy peculiares: dos buzos que trabajan vinculados la petroquímica” y que refleja “ese contraste de la Naturaleza, el litoral tan espectacular que tenéis y el mar y toda la zona más industrial, que es un contraste bastante insólito y a la vez muy cinematográfico”. Zuazua espera que el resultado esté listo para finales de verano del próximo año.
‘Los Tigres’ ha contado con la colaboración de la Diputación de Huelva y la Agencia Destino Huelva, materializada en un convenio que destina un importe de 30.000 euros -15.000 euros cada institución- al alojamiento y manutención de las cien personas del equipo en diversos municipios de Huelva durante los dos meses del rodaje.
En la dificultad para grabar algunas localizaciones también ha sido fundamental la mediación, a través de la Huelva Film Commission, de la Diputación Provincial, como en el acceso a la monoboya de Cepsa y la llegada de un petrolero, escenas fundamentales para ‘Los Tigres’.
En ese hábitat transcurre la historia que cuenta la película: la de dos hermanos, Antonio y Estrella, que llevan toda la vida vinculados al mar; Antonio trabajando como buzo industrial y Estrella estudiando el fondo marino y asistiendo a su hermano en la barcaza para la que trabaja. Pese a jugarse la vida todos los días, su situación económica es delicada. Una situación que puede cambiar cuando se encuentran con un alijo de cocaína escondido en el casco de un carguero fondeado en el puerto de Huelva.
El film contiene la historia personal de búsqueda, para encontrarse, de los propios hermanos . Además de la ría de Huelva, el rodaje de la película incluye escenas grabadas en Matalascañas, Punta Umbría, Mazagón, Rompido, Palos de la Frontera, un barco petrolero, un remolcador y su refinería petroquímica, y el Puerto de Huelva, así como en el embalse de Aracena.
Un equipo de un centenar de personas
El rodaje de ‘Los Tigres’ ha implicado el desplazamiento de un centenar de personas, lo que supone unas 6.000 pernoctaciones y 18.000 servicios de comida, además de todas las actividades que realicen en sus ratos de ocio. A ello hay que sumar el impacto económico que suponen otras acciones como alquiler de material y de espacios y transporte.
Por su parte, se calcula que el rodaje supone un impacto económico directo para el territorio en torno a tres millones de euros, además de un incalculable efecto promocional.