Ecologistas en Acción ‘ha invitado’ a participar a dos organizaciones ecologistas, una inglesa y otra gallega, en la junta de accionistas de la empresa Atalaya Mining en Londres, con el triple objetivo de alertas a los propietarios de las acciones de esta empresa de los riesgos medioambientales que existen en las balsas de lodos de Minas de Riotinto, del peligro que supondrá para la cueva de Altamira un proyecto minero en Santander y las críticas que está levantando en Galicia un proyecto de mina a cielo abierto en Touro.
Según el comunicado hecho público por Ecologistas en Acción, Atalaya Mining PLC cotiza en el mercado de inversión alternativo del Reino Unido (AIM) y este pasado miércoles celebró junta de accionistas en Londres. «El objetivo es prevenir a los accionistas de su responsabilidad debido al estado crítico de las balsas de lodos tóxicos de la mina de cobre de Riotinto en Andalucia», asegura Ecologistas, que ha denunciado en varias ocasiones «el alto riesgo de colapso de las balsas, debido a la mala gestión de Atalaya, la cual puede causar una avalancha de lodos tóxicos que afectarían al Parque Nacional de Doñana y a las localidades de Gibraleón y Huelva, con una ola de de 66,28 millones de m³ y de hasta cinco metros». El riesgo de rotura llega hasta tal punto que desde Ecologistas en Acción se ha solicitado al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía la paralización cautelar de los vertidos de lodos en esas balsas, «para evitar que se produzca un desastre 10 veces mayor que el de Aznalcóllar hace 20 años».
Elena Solís, abogada ambiental e integrante del grupo de minería de Ecologistas en Acción, ha declarado: “La prioridad de las empresas mineras junior como Atalaya Mining es maximizar las ganancias a costa de la falta de inversión en garantizar que las instalaciones sean lo suficientemente seguras. La situación en Riotinto es desesperada. Vidas humanas están en riesgo ya que las balsas están a punto de reventar”.