Vernos y sentirnos bien con nosotras mismas nunca pasará de moda y eso parte del hecho de gustarnos frente al espejo, y por qué no, de hacer cualquier retoque que haga falta con tal de elevar nuestra autoestima y sentir la seguridad necesaria para proyectar la imagen que queremos ante el mundo. 

Entre los múltiples tratamientos que están disponibles encontramos como una de las principales, por ser la más definitiva y efectiva, a la cirugía plástica. Dentro de este sector, intervenciones como la rinoplastía, abdominoplastía, liposucción o cirugía facial figuran como algunas de las más demandadas. 

Sin embargo, el aumento de pecho en Madrid ocupa un puesto de honor entre estas alternativas, a pesar de ser unas de las cirugías más antiguas. Y es que los senos son el símbolo de la feminidad por excelencia, así que si cualquier mujer desea mejorar su aspecto no puede ser juzgada en ningún momento. Aunque en tiempos pasados este tipo de cirugía estaba reservada para mujeres de cierto poder adquisitivo y también era señalada por la sociedad de entonces, hoy en día no es así. 

La cirugía de aumento de pecho para muchas mujeres, lejos de ser un problema estético, significa una mejora invaluable en su condición de salud en general y de su salud emocional y psicológica, las cuales sabemos, ambas influyen directamente en la primera. Por otro lado, es justo reconocer que este tipo de intervenciones quirúrgicas ayudan a muchas mujeres a sobrepasar duras penas relacionadas con el padecimiento de enfermedades graves como puede ser el cáncer o cualquier tipo de accidente. 

También está claro, que es una alternativa valiosa para quienes desean mejorar el aspecto de sus pechos tras haber pasado por embarazos, cambios hormonales o sencillamente, porque desean ponerle un freno a su condición genética. En fin, el aumento de pecho, por suerte, ha evolucionado en cuanto a la calidad de las prótesis mamarias, al tiempo que hoy en día contamos con excelentes profesionales especialistas que se esmeran por hacer de este tipo de intervenciones todo un arte, para que sus pacientes queden completamente satisfechas con los resultados. 

La importancia de elegir a un buen cirujano plástico

En Madrid, la gran metrópolis española, hay excelentes cirujanos plásticos a quienes se puede acudir con mucha confianza y seguridad por la gran reputación que tienen. No obstante, es muy importante que en esa primera visita de diagnóstico, tanto el paciente como el propio médico sientan cierta afinidad. Los niveles de comunicación que se establecen en esa primera consulta, la empatía entre ambas partes y la fluidez de, por una lado entender lo que quiere exactamente la paciente; y por la otra, saber explicar con detalle de qué va el procedimiento y aclarar cualquier duda por pequeña que esta sea, marcarán las bases del éxito de dicha operación. 

Así que si tienes decidido someterte a este tipo de intervenciones es fundamental que conozcas con lujo de detalles cada paso que se debe dar, así como también los riesgos a los que te expones al hacerlo. Acerca de esto, un buen cirujano habla sin ninguna reserva porque es su responsabilidad, como especialista, que su paciente esté consciente de cada aspecto que conlleva este tipo de cirugías. 

Por otro lado, cumplir con cada indicación médica, tanto antes, como durante y posterior a la operación será clave para garantizar el éxito de los resultados y la prolongación de los mismo en el tiempo. 

Además, un buen cirujano plástico contará con las herramientas más vanguardistas del mercado y estará en la capacidad de llevar a cabo el procedimiento más adecuado para cada paciente. Como bien sabemos, son varias las opciones que se ponen sobre la mesa a la hora de someterse a este tipo de cirugía plástica. También, un cirujano plástico experto tendrá la libertad plena de sugerir el tamaño de las prótesis, de acuerdo con el tamaño, la talla y las expectativas de su paciente. 

Lo ideal es que, en caso de que no haya un acuerdo sobre estos detalles, no se adelante ni un paso más. Así que, un buen cirujano, incluso, podrá negarse a hacer una operación de este tipo si considera que la paciente se somete a un riesgo innecesario para ello, o si ve que esta no cumple al pie de la letra con sus indicaciones.