Este sábado será el último día que suene la flauta y el tamboril en el barrio del Polvorín después de unas jornadas intensas para la Real Hermandad de Emigrantes de Nuestra Señora del Rocío de Huelva y la Dominica, Real, Ilustre, Fervorosa y Primitiva Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos de la Sagrada Cena, Santísimo Cristo del Amor, María Santísima del Rosario en sus Misterios Dolorosos y Gloriosos y Santo Domingo de Guzmán con la celebración de sus tradicionales cultos preparatorios para Pentecostés en la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús.
El punto culminante de este último día será la función principal de instituto, programada para las 20:00 horas y presidida por el obispo emérito de la Diócesis, monseñor José Vilaplana Blasco. El evento contará con el acompañamiento musical del coro de la Hermandad de Emigrantes. Seguidamente, se realizará la presentación del cartel de la romería 2024, una obra de la destacada artista onubense Ana Beltrán Ruiz.
Simpecado de Emigrantes
Finalizado el acto, se realizará un traslado popular del Simpecado desde la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús hasta la capilla de la casa de hermandad con el siguiente itinerario: Salida aproximada a las 21:30, recorriendo Presbítero Pablo Rodríguez, Puebla de Guzmán, Barrio Obrero (calle G), Paseo Virgen de la Victoria, Plaza de España, Alameda Sundheim y Plaza del Punto, donde llegará en torno a las 22:00 horas aproximadamente. Continuará por Berdigón, Alonso Sánchez, Plaza Niña (Isabel la Católica), Esperanza Coronada, Padre Andivia, Paz, Miguel Redondo, Arquitecto Pérez Carasa, Palacios, Concepción, Méndez Núñez, Rafael López, Ciudad de Aracena, Ginés Martín, Plaza de la Merced, Ruiz de Alda, Paseo de la Glorieta y llegada a su capilla a las 23:00 horas aproximadamente.
En la jornada anterior, el vicario episcopal para la Administración de los Bienes Diocesanos y Relaciones Institucionales, canónigo de la Santa Catedral, párroco de Nuestra Señora de la Merced y director espiritual de Emigrantes, Jaime Jesús Cano Gamero, ocupó la sagrada cátedra. Durante el ofertorio, se llevó a cabo la imposición de medallas a los nuevos hermanos que lo habían solicitado previamente, acompañados por el coro antiguo de Emigrantes.
Este último día de celebraciones representa un momento significativo para la comunidad religiosa del barrio del Polvorín, marcando el cierre de una serie de eventos cargados de devoción y tradición.