El hecho de que Málaga sea la capital de la mundialmente conocida Costa Sol lleva a muchas personas al error de pensar que la capital malagueña es un producto más del clásico sol y playa. Pero no es así, Málaga es mucho más, tanto por su pasado histórico, que se remonta a su creación por los fenicios, como por su extraordinaria oferta cultural, sin olvidarnos de sus excelente gastronomía.
Por eso hoy te vamos a invitar a pasear, especialmente por el centro de una ciudad moderna y abierta al mundo que tiene en su oferta cultural uno de sus grandes atractivos. Es una invitación a andar, a caminar tranquilamente y descubrir que el coche no es prácticamente necesario, para lo que, eso sí, resulta imprescindible que a la hora de elegir alojamiento lo hagas en una zona céntrica. En Málaga la oferta hotelera es muy completa y con una relación calidad-precio excelente, como por ejemplo la de https://www.hotel-bb.com/es/hotel/malaga-centro.
Nuestra visita va a comenzar por una recomendación que resulta una obviedad, ya que nos encontramos en la ciudad del genial Pablo Picasso. El Museo Picasso de Málaga se ha convertido en el más visitado de la ciudad desde que fue inaugurado en el año 2003. Además, podemos conocer más del cerca a esta imprescindible figura de la pintura mundial acercándonos hasta el Museo Casa Natal de Picasso, situado en la plaza de la Merced, en pleno centro.
El contraste pictórico al mundo de Picasso lo podemos encontrar en el Palacio de Villalón, donde se encuentra el Museo Carmen Thyssen Málaga, que cuenta con una exposición permanente, de más de 200 obras, centrada en el siglo XIX.
Que el Centro Pompidou haya elegido Málaga para abrir su primer centro fuera de Francia nos indica hasta que punto Málaga atesora un patrimonio digno de admiración. Fue en el año 2015 cuando una extensión del mundialmente famoso Centro Pompidou de París abrió sus puertas en la capital malagueña. Volvemos al presente y sobre todo al futuro cuando nos asomamos a este centro, situado en el puerto de Málaga, en el Muelle 1, y que es reconocible por su exterior en forma de cubo multicolor.
Un año después del Centro Pompidou, la capital costasoleña incorporaba a su oferta cultural el Museo de Málaga, ubicado en las instalaciones del impresionante Palacio de la Aduana. Cuenta con objetos provenientes del Museo Arqueológico provincial y del Museo de Bellas Artes, siendo la mejor forma de adentrarnos en la historia de la ciudad, desde el Paleolítico hasta nuestros días.
